Luego de un año de ir soltando uno a uno los tracks de su nuevo disco, la argentina Daniela Spalla presenta al fin su segundo LP titulado Camas Separadas, un disco para todos, pero sobretodo para aquellos que entiendan de las decepciones amorosas.
En este nuevo material, Spalla explora dentro de sí misma para presentarse de la manera más nítida ante el mundo. Camas Separadas es un álbum que cuenta la historia de Daniela y la de todas esas personas que alguna vez vieron su corazón romperse frente a sus ojos.
Más allá de sumergirse en la tristeza, Daniela exprime de la amargura la nostalgia y crea así 10 tracks que van narrando una historia de desapego y despedida.
Anteriormente, Daniela Spalla nos contó en entrevista sobre lo terapéutico que había sido escribir cada canción que compone al disco.
“El disco es muy homogéneo. He estado sacando canciones y a veces siento que todas suenan igual, pero lo que pasa es que el disco es así. Desde las letras es un disco muy monotemático y a nivel sonido es muy homogéneo. como que el sentimiento es lo que prevalece“.
Ciertamente, Camas Separadas es un disco cargado de sentimientos varios, tal cual como sucede en el interior de una persona cuando uno termina una relación. Desde frases como “¿Cómo me dejaste de amar, sin golpe y sin avisar?” (“Estábamos tan bien”), que reflejan la tristeza y confusión de la primera etapa de desprendimiento, hasta “Llegas y matas lo poco de cordura que me queda y no me dejas avanzar” (“Vete de una vez”), que dan cuenta de lo difícil que es dejar ir al que creíste el amor de tu vida.
Siguiendo cada corte, “Insomnio” es el ejemplo de confusión, de esta desesperante etapa en la que no hay vuelta atrás, pero el futuro es incierto y asusta. “Costa Rica”, por su parte, es la manera de Spalla de decir asumir la derrota, abrazar el dolor y aceptar el fin de un ciclo.
Así, cada corte nos lleva de viaje a los recuerdos de Daniela, sumiéndonos en hermoso y poético que hay detrás de un adiós.
Grabado en la Ciudad de México, Camas Separadas es un disco inspirado en el pop de los años 70. Las letras, así como la producción en general, fueron supervisadas por Adan Jodorowsky, cantante y compositor bien conocido por saber manejar mejor que nadie los sentimientos en una canción.