Interpol nos llevó a un nostálgico viaje al pasado en el Corona Capital 2019

El nombre de Interpol en el cartel fue de lo que más emocionó a todos los fanáticos de rock alternativo al momento de revelar el line up de la décima edición del Corona Capital. Junto con The Strokes y Keane, los neoyorquinos levantaron las expectativas a tope.

Desde el año pasado que se jalaron al Teatro de la Ciudad de México, los que fueron se quedaron con ganas de más, y los que se quedaron en casa, no podían esperar por verlos después de algunos años de espera.

Porque cuando empiezas con algo del Antics, no puedes fallar. “C’mere” empezó a sonar en punto de las 10:40 de la noche para dar inicio a la increíble y nostálgica presentación de Interpol en el Corona Capital.

Todos los amantes de la buena música se fueron al cielo con los primeros guitarrazos de la Gibson de Paul Banks. Ese fue el momento, en el que a pesar del ya tan familiar cansancio festivalero, todos decidieron dar un último jalón para disfrutar de esas rolas que nos vieron crecer.

Después de esos muy rápidos tres minutos, todo lo que siguió fue la continuación de un sueño. “The Heinrich Maneuver”, la primera del Our Love To Admire, explotó a través de las bocinas del escenario. “Esta canción es de nuestro primer disco”, dijeron, para darle entrada a una nostálgica “NYC”.

Con apenas una pequeña pausa entre rolas, llegó más de Antics con “Evil”, su rola más reproducida en la historia de Spotify (y es que ese bajo se lo merece). Todas estas canciones se hicieron sonar para el placer de todos los fanáticos longevos de Interpol.

Foto por Stephania Carmona

Su excelente juego de luces, a la par de su música, nos metieron a un lugar muy bello, pero por momentos falto de oxígeno de tanto cantar. Entre cada dos o tres rolas, los músicos se tomaban un momento para decir algo relacionado con la próxima rola o con el cariño que le tienen a México.

“Para nosotros es lo máximo estar aquí” dijeron justo antes de lanzar “Take You On A Cruise”, y también antes de tocar “The Rover”, la primera canción de su último disco Marauder con el que explicaron que gracias a este material han estado viajando por todo el mundo, pero que el video lo grabaron aquí…

Las rolas que siguieron, no hicieron otra cosa mas que pedir a un escenario Corona llenao que siguiera cantando y moviéndose, y disfrutando de una edición que apeló a los puntos más finos de nuestra nostalgia. Este cierre estaba a reventar de pies, cansados pero bailadores, de gente con la mejor vibra, pero sobre todo, con un aire de melancolía que no se podía esconder.

Las rolas que seguirían, provocaron la salida de una que otra lágrima. Lo vimos, lo vivimos, se siente cuando la multitud se entrega a una banda que ya había hecho lo mismo. “Narc” y “Slow Hands”, dos canciones más de su tan amado disco con portada blanda y letras negras y rojas. La clásica del Guitar Hero que todos los que lo tuvieron amaban tocar, se dio cita también: “Obstacle 1”.

Después de estarse ultra rifando durante una hora aproximadamente, una larga pausa empezó a alejar a algunos fanáticos del escenario principal; sin embargo, Interpol regresó al escenario para hacer que todos cambiaran de dirección. Paul Banks y compañía se aventaron las últimas para todos los que se quedaron esperando por más.

Los formados en Nueva York se despidieron de México de la mejor manera posible: apelando a la nostalgia, a la calidad, y no necesariamente a sus rolas más sonadas. “Not Even Jail” y “Stella Was a Diver and She Was Always Down” fueron las elegidas para cerrar la noche. Un verdadero regalo para los fanáticos de Interpol desde ese lejano Turn On The Bright Lights del 2002.