El 4 de septiembre es un día especial para los chilangos, hace 50 años inició operaciones el maravilloso Metro de la CDMX, ese transporte que todo el mundo ha tomado al menos una vez en la vida y que llegó para hacerle la existencia más fácil a muchas personas. Miles de cosas pasan todos los días en las 12 líneas que la conforman, desde el vagonero que te pone la bocina en la oreja hasta historias de ultratumba que se cuentan entre las estaciones.
Pero hay una canción que representa por completo lo que es viajar en este sistema, “Estación del Metro Balderas” del gran Rockdrigo González aunque, no se ha salvado de la polémica. Por años hay quienes pensaron que esta canción es de Alex Lora y El Tri, gracia al cover que le hicieron a mediados de los 80. Pero no se preocupen, acá les contamos la historia detrás de este rolón que cualquier persona que se jacte de ser un chilango de corazón se sabe o ha escuchado.
La historia trágica de Rockdrigo
Rockdrigo González, conocido de cariño como ‘el profeta del nopal’ fue uno de los cantautores mexicanos más prolíficos de su generación, hubo quien se atrevió a considerarlo como el Bob Dylan mexa, gracias a que componía rolas que hablaban de situaciones comunes como la violencia, la marginación hasta temas más grandes como la globalización. En cada una de sus canciones él le daba voz a todos aquellos que querían decir algo.
En 1982 Rockdrigo compuso “Estación Metro Balderas”, una de las canciones más conocidas de toda su carrera incluida en el álbum Hurbanistorias lanzado el mismo año. La base de la canción es sencilla aunque muy poderosa, tan solo la guitarra y una armónica. En la letra Rockdrigo nos hace una narración completa y detallada de una situación, similar a las narraciones de José Agustín en Tragicomedia mexicana.
A lo largo de la canción, nos presenta la historia una persona quien presuntamente secuestra el metro, obligando al conductor a escucharlo: “Sáquese de aquí señor operador este es un secuestro, yo manejo el convoy, mejor haga caso para usted es mejor así es que hágase a un lado porque yo, ahí le voy”. Después, el secuestrador se desahogaría, contando la trágica historia de cómo perdió a un amor entre la multitud del metro Balderas, haciendo énfasis en que habían pasado cuatro años desde que le destrozaron el corazón. A pesar de estar muy triste por esta situación, no quiere pasar por Balderas para no recordar lo que vivió ahí
Más tarde vendría una de las frases mejor pensadas en la carrera de Rockdrigo: “Ya lo dijo Freud, no recuerdo en que lado solo es la experiencia que he experimentado” dándole un toque humor ácido y mostrando el conocimiento que tenía González al estudiar algunos meses la carrera de Psicología en la Universidad Veracruzana. Al final el cantante nos entregaría uno de los monólogos más importantes de la vida chilanga.
Alex Lora y su ‘propia versión’ de “Metro Balderas”
Al firmar con una nueva empresa discográfica, Alex Lora y el Three Souls In My Mind decidieron hacerle un de nombre y lo redujeron solo a El Tri. Para iniciar esta etapa nueva en la banda, grabaron el disco más ambicioso de su carrera, Simplemente, donde venían rolones como “Triste canción” y por supuesto un cover de “Estación del Metro Balderas” aunque con unos ligeros cambios.
Alex Lora decidió llevarla directo a su estilo. La oscuridad, el ritmo lento, la excelsa narración que era acompañada por una guitarra y armónica cambió para ser una canción completamente rockera y pensada para una banda completa, guitarra eléctrica, bajo, batería y hasta encontraron un espacio para meterle un solo de saxofón.
Quizá lo más importante es que la letra sufrió una enorme modificación, por ejemplo, nunca se hace mención al asalto del metro, incluyendo las amenazas al operador y la frase que menciona a Freud, por ende, muchas de las referencias a la estación desaparecieron. En cambio, Lora introduce a un chofer (raro porque normalmente solo se le llama así a los conductores de combi y pesero) y a lo largo de la canción hace una descripción general de cómo es viajar en el metro, mencionando a estaciones de todas las líneas, aunque en esta versión se siente que la historia se cuenta en las calles de la ciudad y no en los túneles.
Para terminar, Alex dice que lo que quedó embarrado no fue su corazón sino su reputación, cosa que a todo el mundo sacó de onda aunque se explica perfectamente en el último verso que escribió El Tri: “Fue en la estación del metro Balderas, ahí fue donde ella se metió al talón”, asumiendo que la mujer a la que hace referencia entró a la prostitución, terminando un poco con el sentido poético que Rockdrigo le había dado en la versión original.
Aunque la polémica ha estado rondando siempre a la canción, ya que Alex Lora fue acreditado como co-compositor de la rola, recibiendo críticas negativas y el rechazo de González por haber ‘mutilado’ una de sus mejores composiciones e incluso grabándola sin el consentimiento del ‘profeta del nopal’. “Metro Balderas” logró que esta historia fuera conocida por mucho más público. Después de un largo tiempo Rockdrigo fue reconocido con una estatua dentro de la estación de Balderas, para recordar la gran rola que compuso homenajeando todo lo que sucede dentro de ella.
