Todos los que han ido a un concierto de Tame Impala saben que son sumamente enérgicos. A través de sus poderosas y distorsionadas guitarras uno de pronto pierde el control y cae en un abismo psicodélico en el que, o nos pone eufóricos o hipnotizados con los ojos cerrados.
El caso es que en su pasado concierto en el Théâtres Romains de Fourvière en Lyon, Francia, el concierto terminó en una aclamada guerra de almohadas, con la cual el público frenéticamente lanzó a la banda como una señal de aprobación.
El recinto tiene la tradición de dar cojines en cada uno de sus shows, pero pareciera que los organizadores no saben lo que la música de Tame Impala genera. Obviamente nadie permaneció sentado y en el momento más emotivo de la presentación la gente comenzó a lanzar las almohadas por todas partes. De pronto el recinto se cubrió en una lluvia de cojines tan increíble que los integrantes de la banda y su staff quedaron maravillados.
Sin duda terminar un concierto de esta manera debe ser sumamente increíble y con mucho alivio de estrés.
Crowd standin there all guilty like a puppy dog sittin next to a pile of poo
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