Ayer domingo, Kate Moss, la supermodelo inglesa de 41 años tuvo que ser expulsada del avión, después de que se puso bien loca en un vuelo de Bodrum (Turquía) a Londres. De esta bonita historia hay dos versiones, las cuales les presentamos para que elijan su favorita…
Versión de la aerolínea
Doña Kate regresaba de unas vacaciones turcas y para relajarse durante el vuelo se puso a beber de la botella de vodka que traía en su equipaje de mano. Sí, como si fuera teporocha. Con las turbulencias la modelo se puso alegre y le dio por comportarse de manera inadecuada.
Así, en cuanto el vuelo de EasyJet aterrizó en el aeropuerto de Luton-Londres, Moss fue sacada de la aeronave y fue escoltada por la policía, eso sí, no sin antes insultar al piloto del avión. De acuerdo a fuentes policiales consultadas por The Guardian:
Se ha reportado que la pasajera ha sido molesta en el vuelo.
De momento la aerolínea no ha presentado formalmente ninguna queja, por eso la modelo no fue arrestada. Y es los de EasyJet son bastante especiales, pues en un comunicado reafirmaron que…
La aerolínea no tolera el mal comportamiento y siempre denunciará cualquier incidente a las autoridades.
Versión de los pasajeros
Una pasajera del avión le comentó al Daily Mail que el comportamiento de Moss no fue tan molesto como se dice.
Estaba un poco borracha y tuvo una discusión con otro pasajero del vuelo, tras negar el alcohol que servía en el avión y beber de su botella de vodka que llevaba en equipaje de mano. No estaba agresiva, en realidad era divertida.
Esta mujer que atestiguó los hechos informó que el comportamiento del personal de EasyJet fue desproporcionada.
Lamentablemente no existe más información al respecto.
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¿Cuál será la versión real? De cualquier forma “qué oso weeeee” que te bajen del avión.
Por cierto, para quienes se lo preguntan, Moss fue a Turquía a celebrar las 50 primaveras de la actriz Sadie Frost. Ah, y la foto principal de esta nota no corresponde al suceso de ayer, pero nos pareció vaciladora para ilustrar lo ocurrido.