Luego de que el gabinete de Seguridad del gobierno de AMLO aceptó que se dio la liberación de Ovidio Guzmán, hijo del Chapo, para evitar que los hechos de ayer –17 de octubre– acabaran en una masacre… es decir, que se acabó por ceder a la presión del crimen organizado… la primera pregunta que surge es ¿y ahora, manito?
Durante la conferencia de prensa que ofreció el titular de Seguridad Ciudadana, Alfonso Durazo, éste dibujó las acciones que el gobierno federal emprenderá, en corto, para volver a tomar el control de Culiacán (cof, si es que alguna vez lo tuvieron, cof).
La verdad no son acciones que hacen exclamar “¡qué bárbaros, ahora sí, pinc%&es criminales… agárrense!”, pero es lo que hay… por el momento: Para empezar, Durazo aclaró que no hubo nada, nadita de negociación entre el crimen organizado y las fuerzas federales, soldados o cualquier autoridad para decidir la liberación del hijo del Chapo. Es decir, toda la bronca se le puede embarrar al gabinete de Seguridad del gobierno de AMLO (quien, por cierto, dijo que estuvo de acuerdo).
Ahora bien, se mencionó que ya está en marcha un programa de reforzamiento en el despliegue de fuerzas federales en la ciudad, esto con el propósito de garantizar la seguridad de los habitantes de Culiacán y áreas aledañas. Con esto, señaló que se espera que de forma progresiva vuelvan las cosas a la “normalidad” (escuela, gente en las calles, negocios abiertos… esas cosas en las que uno no piensa cuando hay tremendas balaceras).
Como evidentemente se careció de planeación en el operativo para aprehender a Ovidio Guzmán, Durazo señaló que se procederá a revisar “los protocolos de actuación y de sometimiento a instancias superiores de iniciativas y planes operativos de esta dimensión y naturaleza”.
Urgente, ya que durante esta conferencia se aceptó que todo el despapaye se originó porque los elementos que fueron por Ovidio, hijo del Chapo, se emocionaron y no se esperaron a contar con orden de cateo… y, pues en lo que la esperaban, fue cuando les cayeron todos los cuates de Guzmán y así fue como los doblaron.
Ahhhh, pero eso no quiere decir que no habrá responsables… o al menos se intentará dar con ellos. Según Durazo, se investigarán eventuales inconsistencias u omisiones que pudieran llevar a señalar la responsabilidad de los participantes del ahora llamado “operativo fallido”. Sobre esto, el titular de la SEDENA, Luis Cresencio Sandoval, indicó que también ellos harán la revisión de cómo actuaron los militares y, si es el caso, pasarán el dato a las instancias correspondientes para que se proceda como corresponde.
Y ya… ¿y ya? Sí, hasta el momento, tanto AMLO como Alfonso Durazo indicaron que se continuará con la estrategia de seguridad que se ha manejado en los últimos meses. ““Esta decisión no modifica nuestra visión de que tenemos que atender las causas profundas que generan la inseguridad”, señaló el titular de Seguridad Ciudadana.