Estados Unidos ya no es territorio de fiar, al menos para los funcionarios mexicanos que buscan esconderse de la justicia. El fiscal general de Nayarit fue el primero en caer en desgracia (nomás porque traficaba cargamentos de droga). Ahora se trata del exsecretario de Hacienda de Sonora, Carlos Villalobos, quien fue capturado por las autoridades gringas, esto por petición de la PGR.
De acuerdo con Reforma, Villalobos (quien tenía en su contra ficha roja de la Interpol) habría sido detenido ayer en Estados Unidos. Entre los delitos de los que se le acusa se encuentran uso indebido de las facultades y atribuciones y, quizás el más importante, el posible desvío de mil 600 millones de pesos, transa que habría hecho mientras fue parte del equipo del ahora preso, exgobernador de Sonora, Guillermo Padrés.
¿Se les hace mucho mil 600 millones de dolarucos? Bueno, quizás pudo haber sido más. Para suerte de las arcas sonorenses, Villalobos sólo estuvo como secretario de Hacienda durante la segunda mitad del sexenio de Padrés.
Recordemos que el exgobernador de Sonora está guardado por las autoridades mexicanas, luego de que él mismo se entregara. Aunque esta acción valió para que el PAN no fuera tan duramente señalado como lo es ahora el PRI con sus dos Duartes en fuga (César y Javier), no dudamos que ahora podría arrepentirse, sobre todo al saber que podría pasar de 38 hasta 94 años de prisión.
El hombre que tuvo su propia presa, mientras que gente de diversas poblaciones en la entidad se encontraban sin suministro de agua, enfrenta cargos como lavado de dinero y defraudación equiparada… por si fuera poco, también lo acusan de delincuencia organizada. De acuerdo con la PGR, Padrés Elías, habría movido al menos 312 millones de pesos de procedencia ilícita, de los cuales 178 eran del erario estatal.
Según reporta Proceso, fuentes oficiales señalan que Villalobos está relacionado en la mayoría de las transas que se pudieron cometer en el sexenio de Padrés, las cuales impidieron que dinero que estaba destinado a los rubros de salud, educación, seguridad e infraestructura, llegaran a donde tenían que llegar.