¡Qué pinch#$%s nervios! Estamos a días, quizás horas, de saber cuál será el triste destino del avión presidencial y lo más seguro es que habrá que comprar un cachito para que salga, porque eso de vendérselo a algún líder mundial, parece que nomás no funcionó.
Ya ni porque iba a combinar con su guapura… ni por eso Justin Trudeau quiso comprarse la navezota. De acuerdo con lo dicho por AMLO, el primer ministro de Canadá fue uno de los últimos sujetos a los que el gobierno de México intentó enjaretarle el avión presidencial, pero el primo de Winnie Pooh lo rechazó. No por falta de dinero…sino porque la aeronave le resultó demasiado lujosa para sus necesidades.
“No le entró porque el que se le descompuso es de menor calidad y no tiene tantos lujos como el de México. Por eso como nos ha costado un poco deshacernos de él, se va a rifar a todo el pueblo”, confirmó el mandatario mexicano.
Según explicó AMLO ante una jetona audiencia presente en un evento realizado en Solidaridad, Quintana Roo, la 4T vio la oportunidad de vender el avión presidencial a Trudeau, luego de enterarse que su nave ya chafeó. Pero todos los esfuerzos fueron en vano, ya que el ídolo de la chaviza (ya no tanto después del escándalo de su “blackface”) rechazó la oferta de adquirirlo en sólo 130 millones de dólares.
¿Entonces sí se rifará?
Aunque López Obrador anunció que será en los próximos días cuando se dé a conocer qué pasará con el avión presidencial, pues ya está más que cantado lo de la rifa. Tanto así que aseguró que aquel suertudote al que se le pasen todas las responsabilidades fiscales y de mantenimiento de la aeronave… mínimo va a tener dónde dejarlo.
“Y no se preocupen de dónde lo van a estacionar. Para el que lo obtenga mediante la rifa, ahí van a estar los aeropuertos de la Fuerza Aérea Mexicana para guardarlo”, prometió el presidente.