“Traidores, vendepatrias y este es el regalito que le van a dar al Papa” fueron los gritos de reclamo que se hicieron presentes en una sesión que duró poco más de tres horas, y en la que legisladores priístas y panistas reconocieron fallas en la redacción del artículo.
Sin embargo, lo anterior no fue impedimento para que el Senado aprobara la reforma al artículo 24 constitucional, para establecer que “Toda persona tiene derecho a la libertad de conciencia y de religión, y a tener o adoptar, en su caso, la de su agrado. Esta libertad incluye el derecho de practicar, individual o colectivamente, tanto en público, como en privado, las ceremonias, devociones o actos del culto respectivo, siempre que no constituyan un delito o falta penados por la ley. Nadie podrá utilizar los actos públicos de expresión de esta libertad con fines políticos, de proselitismo o de propaganda política”.
El dictamen fue votado con mayoría del PRI y PAN a favor, sólo perredistas y Dante Delgado, miembro de Movimiento Ciudadano, votaron en contra; éste último insistiendo que la redacción es pésima y el incluir la libertad de convicciones éticas es muy riesgoso, ya que, ejemplificó, da pie a que un médico argumente que no puede practicar un aborto porque sus convicciones no se lo permiten.
Por su parte, el perredista Pablo Gómez cuestionó el porqué reformar un artículo “donde ya se establece la libertad de profesar la religión que más le convenga”.
Ante estos dichos y preguntas, panistas reconocieron que sí está mal redactado el nuevo primer párrafo del art. 24 pero “es difícil construir textos con la redacción más correcta”. El priísta Jesús Murillo Karam estuvo de acuerdo con Dante Delgado, pero indicó que la nueva redacción tenía sus elementos positivos, por lo que su bancada votaría a favor.
Destaca que uno de los argumentos que presentaron los senadores que reconocieron los errores en redacción, fue que de no aprobarse, la minuta tendría que regresar a la Cámara de Diputados… ¿y cómo van a trabajar doble, no? El presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, Melquiades Morales, se negó a que ahí mismo se modificara el dictamen. Pero no porque se tendría que regresar a la Cámara de Diputados, recalcó. Ahhhhhh.
Afuera del recinto legislativo con pancartas que decían: “el respeto al Estado laico es la paz… como buitre el clero ambiciona el poder y dinero, no tiene llenadero… Estado laico sí, privilegios no”, integrantes del Foro México Laico exigían no modificar la Constitución. Sin embargo, no fueron escuchados.
Vía: La Jornada