¿Y luego nos preguntamos porqué dicen que los mexicanos ponemos todo en un bolillo? Este martes, la Policía Federal detuvo una de sus cargas más extrañas de su historia en el Aeropuerto de Guadalajara, pues detuvieron un cargamento de bolillos con cocaína intentando llegar a Estados Unidos.
Ese pequeño párrafo podría ser la nota completa y tendrías suficientes ejemplos absurdos del ‘ingenio mexicano’, pero no. Por suerte, la historia sigue dando.
¡Bárbaros! Intercepta @PoliciaFedMx bolillos rellenos de cocaína en aeropuerto de #Guadalajara. Su destino era #California. pic.twitter.com/f7rfDVKT1N
— Paco García Davish (@pacodavish) 7 de agosto de 2018
Los narcotraficantes de la historia en cuestión no estaban intentando quitarle el imperio a CJNG o al Cártel de Sinaloa; digamos que eran unos Pepe y Toño del tráfico de estupefacientes porque el ‘cargamento’ decomisado esta mañana era de —redobles, por favor— ¡15 bolillos!
De la quincena de bolillos, solo cuatro venían cargados con migajón especial. Además, por si el crimen intentaba pasar desapercibido, el reporte de la Policía Federal dice que el paquete de pan venía nada más envuelto en la bolsa de plástico que ven en la foto. Algo “poco convencional” para el equipaje documentado que acostumbran ver en los aeropuertos.
Este combo “Viaje y si se espanta, cómase el envoltorio” no juntaba ni los 120 gramos. Sin embargo, en el mercado estadounidense, los narcotraficantes estaban intentando hacer un business de 18 mil dólares o más de 300 mil pesos.
Las primeras investigaciones de la División de Seguridad Regional de la Policía Federal indican que la cocaína —con todo y el kit anti-sustos— tenían la intención de llegar a Huntington Park en California. De mientras, el cargamento —JA— no pasó de la aduana de Jalisco y ya fue puesto a disposición de los agentes del Ministerio Público.
*Foto de portada: @PoliciaFedMx