Hace una semana, David Byrne publicó una carta escrita por Brian Eno en la que critica al gobierno estadounidense por apoyar a Israel en su guerra actual contra Hamas. Desde su punto de vista, Estados Unidos -con el dinero del erario- proporciona ayuda militar a un país que está cometiendo todo tipo de atrocidades en la franja de Gaza contra civiles palestinos. Incluso compara a Israel con el Ku Klux Klan por la retórica racista que han empleado algunos de sus políticos en sus discursos nacionalistas. Se trata de un desastre humanitario que el artista no puede comprender la razón por la cual Estados Unidos se niega a levantar un dedo para detener.
Estos fueron los puntos más importantes en su primera carta:
-¿Por qué América continúa su apoyo a ciegas de este ejercicio en limpieza étnica? ¿Por qué? Simplemente no lo entiendo.
-El América que conozco y me gusta es compasivo, de mente abierta, creativo, ecléctico, tolerante y generoso. Ustedes, mis amigos americanos, simbolizan estas cosas para mi. ¿Pero cuál América está apoyando esta horrible guerra colonialista unilateral? No lo puedo imaginar. […] ¿Qué mal se ve cuando el mismo país que se identifica más con las nociones de Libertad y Democracia va y pone su dinero exactamente donde sus nociones no encajan y apoyan una teocracia sumamente racista?
-Con respecto al Proceso de Paz: Israel quiere el Proceso pero no la Paz. Mientras el “proceso” se lleva a cabo, los colonos siguen apropiándose de tierra y construyendo sus colonias… y cuando los palestinos finalmente estallan con sus patéticos fuegos artificiales, son martillados y pulverizados con misiles de tecnología de punta y proyectiles de uranio porque Israel “tiene un derecho a defenderse” (mientras Palestina claramente no).
-Pero más allá de eso, lo que realmente me preocupa es la foto grande. Les guste o no, en los ojos de la mayor parte del mundo, América representa “Occidente”. Entonces se percibe a Occidente como el lado que apoya la guerra, a pesar de todo el discurso sobre moralidad y democracia.
Palabras fuertes de Eno.
David Byrne le permitió el espacio a una réplica escrita por un amigo de ambos, el escritor judío Peter Schwartz. En esa carta, Schwartz escribe que el conflicto entre Israel y Palestina es demasiado complejo, con muchas matices y no debe ser una decisión fácil para una persona informada apoyar la causa de un bando u otro. También critica a Eno por singularizar el conflicto en Gaza cuando el mundo está más que saturado con conflictos de todo tipo y en todos lados.
Brian Eno escribió su respuesta a Schwartz, la cual fue publicada ayer en el sitio Stop The War Coalition. Se trata de una respuesta todavía más extensa, la cual refleja la indignación del músico, pero básicamente no se desvía de su punto principal: su objeción al apoyo de los gobiernos de occidente a lo que es básicamente una masacre.
-No se trata nada más de Israel para mí, pero sobre lo que mi gobierno está haciendo en mi nombre. El dinero que pagamos en impuestos está ayudando a respaldar esta situación. Puedo entender todas las razones que has alistado para explicar porqué nuestros respectivos gobiernos han terminado con las posturas que tienen, pero entender no es lo mismo que condonar. Quiero dejarles en claro a ellos que “muchos de sus ciudadanos no los apoyan”. Esto es lo que yo entiendo por participación democrática, responsabilidad cívica.
-Pero mi punto principal es escoger las peleas que puedes ganar. Mientras no tengo los instrumentos con los cuales afectar las políticas sudaneses (incluso si quisiera), si tengo algo de poder para cambiar la manera en que el Reino Unido se relaciona a Israel.
-A pesar de la saturación de propaganda nacionalista, existe una contracultura judía en Israel la cual, junto con los Palestinos, se acerca a nosotros para pedir ayuda. […] Estas no son las personas que quieren destruir a Israel: ellos quieren salvarla de un camino que ellos ven como un alejamiento de los ideales sobre los que fue fundada.
-¿Cómo crees que se ve para el resto del mundo cuando ven a Israel haciendo añicos a los palestinos en Gaza y luego descubres que América les sigue dando como 18 millones de dólares en ayuda militar cada día – mientras que rectamente proclaman su apego a los derechos humanos?
-Una de las razones que quiero demostrarles es decir “No nos juzguen por nuestros gobiernos” – lo cual es una de las cosas que los judíos israelíes me dicen. Probablemente piensas que se trata de un idealismo sin esperanzas, pero creo que sí se puede hacer una diferencia cuando gente ve que otras personas – las que se supone deben de odiar – están protestando en contra de lo que se hace en su nombre.
Puedes leer la carta completa de Eno por acá.