Recientemente las calificadoras han ajustado sus perspectivas sobre las finanzas de México y sus instituciones a la baja… lo cual muy pocos saben qué implica realmente, pero ahhhh… qué miedo, porque seguramente no es nada bueno. Pero bien, pese a lo que muchos piensan, estas calificaciones negativas no son resultado de las malas decisiones que “dicen” está tomando el gobierno de AMLO. ¿Entonces? Son por culpa de las políticas económicas que se han tomado en los últimos años, asegura el presidente.

Ayer, Standard & Poors redujo la perspectiva de calificación de Pemex y la CFE de estable a negativa… lo cual no fue un caso excepcional: junto con ellas, la calificadora pasó tabla a 77 instituciones financieras de México, entre ellas empresas privadas, aseguradoras e instituciones de infraestructuras. Banobras, Bancomext, Bansefi, Infonavit, BBVA Bancomer, Banorte, Citibanamex, HSBC, Inbursa, Scotiabank, entre las víctimas.

Aun así, el anuncio sí caló… apenas la semana pasada, la calificadora disminuyó la evaluación de México de la misma manera: de estable, pasó a negativa, bajo el argumento de que las previsiones de crecimiento económico para nuestro país no son muy buenas. Según indica El Financiero, la calificación soberana del país se mantuvo en ‘BBB+’… aunque se espera que baje en los próximos 18 meses. ¿Sí? Existen un tercio de probabilidades de que eso suceda.

Sin desaprobar a S&P, AMLO señaló que lo que se está viviendo con este tipo de órganos, es el resultado de lo que se hizo… o dejó de hacer… en las pasadas administraciones. “Nos toca pagar los platos rotos, para que esto también quede claro”, señaló, agregando que las bajas calificaciones son el “castigo” que tiene el país por las décadas en las que se aplicaron políticas neoliberales.

… no obstante, el presidente no se quedó tan conforme con la baja de las calificadoras, señalando que éstas no dijeron ni “pio” cuando en los sexenios anteriores se saqueaba a CFE y Pemex. Permanecieron “calladas”, reprochó AMLO. “Lo único que puedo reprochar, de manera fraternal, a las calificadoras es es que durante todo ese tiempo que imperó la corrupción permanecieron callados. Calificaban con 10, con excelencia”.

En fin, pese al gris panorama que las calificadoras ven para México, AMLO advirtió que demostrará lo contrario… con la confiable aniquilación de la corrupción.  “Los hechos van a ir hablando. Cuando se acabe con la corrupción y se rescate a Pemex ya  al CFE se aclararán las cosas. Estoy optimista. No es un asunto complicado. Grave. Depende de un manejo eficiente y honesto… y eso ya está resuelto: no se tolera la corrupción, como antes”.

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