Si creían que el gobierno de AMLO se ha visto demasiado “contreras” entre lo que prometió en campaña y lo que anda haciendo… es porque no han volteado a ver a Canadá, donde la administración se aventó a declarar “Emergencia Climática por Calentamiento Global”… y horas después dio el visto bueno para ampliar un oleoducto.
De acuerdo con El País, primero el gobierno de Canadá se lució emitiendo la mentada declaratoria de emergencia. Además de los paisanos de Winnie Pooh, sólo países como Reino Unido y El Vaticano se han aventado a aceptar que el mundo se encuentra en un momento crítico por el calentamiento global. Sin embargo, al día siguiente se confirmó la decisión de construir la segunda línea del oleoducto Trans Mountain, empresa que diariamente maneja 300 mil barriles de petróleo.
Canadá declara la emergencia climática por el calentamiento global y 24 horas después aprueba construir la segunda línea de un oleoducto https://t.co/1xFb5MoOHn
— EL PAÍS América (@elpais_america) 19 de junio de 2019
Así que, mientras por un lado el gobierno de Canadá asegura que estamos ante “una crisis real y urgente, provocada por la actividad humana, que afecta el medioambiente, la biodiversidad, la salud y la economía de los canadienses. Es un problema de seguridad nacional. Y es tiempo de que comencemos a tratarlo como tal” (que fue lo que dijo la ministra del Medio Ambiente, Catherine McKenna, al presentar la moción ante el Legislativo)… por el otro, dejará que la compañía Kinder Morgan continúe la extracción de hidrocarburos con alto impacto ambiental: con la ampliación del oleoducto, de 300 mil barriles, se espera que se puedan alcanzar los 890 mil barriles diarios. ¿?¿?
“La aprobación del proyecto por parte del Gobierno de Trudeau, luego de haber declarado que estamos en estado de emergencia climática, es igual de lógica que tratar de apagar un incendio con un lanzallamas”, criticó Patrick Bonin, portavoz del capítulo canadiense de Greenpeace a Radio-Canadá. Por su parte, el líder del Nuevo Partido Democrático, Jagmeet Singh, advirtió que un solo derrame que se llegara a dar en la costas de la Columbia Británica sería fatal para la biodiversidad de la región… sin contar la afectación a la industria pesquera.
Al respecto, representantes del partido del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, aseguraron que no hay contradicción: la declaratoria de emergencia climática y la luz verde para construir el oleoducto es una prueba del equilibrio entre el crecimiento económico y el cuidado medioambiental. What!!?