Y en su gustada sección “Ese Chapo era un lokillo”, el abogado del exlíder del Cártel de Sinaloa se llevó un jalón de orejas por parte de las autoridades gringas, nomás por andar mandando tuitazos en los que hace referencia a la canción favorita de su cliente, Joaquín El Chapo Guzmán.
¿Nomás por eso? En efecto… aunque el asunto tiene su historia detrás. Pues resulta que en una más de las balconeadas que le están aplicando a Guzmán Loera (en el marco del juicio en su contra en Corte norteamericana), un testigo identificado como Miguel Ángel Martínez, alias El Gordo, dio a conocer cuál era la canción favorita de su expatrón…
Bueno, la referencia a Un puño de tierra, no fue tan feliz como se podría suponer… el expiloto del capo (y ahora testigo protegido) mencionó la sabrosa melodía norteña para describir una de las cuatro veces que El Chapo le quiso dar cuello.
Según El Gordo, también conocido como El Tololoche (la verdad está con más pegue este último, ¿sinonoraza?), en uno de los atentados en su contra un grupo musical tocó en repetidas ocasiones la mencionada canción… ¿y porqué el jalón de orejas al abogado del exnarco, si quien lo mencionó fue el testigo?
Ramon Ayala – Un Puño de Tierra https://t.co/i4ixqfHhgG via @YouTube
— BALAREZO LAW (@balarezolaw) 29 de noviembre de 2018
Ahh, pues fácil: con la información, el buen Eduardo Balarezo (como se llama el leguleyo que defiende a Guzmán Loera), publicó un tuit en el que simplemente colocó la mencionada canción, en interpretación de Ramón Ayala (está mejor la de Antonio Aguilar, pero bueno…) La acción de Balarezo fue considerada por la Fiscalía como una amenaza al testigo, lo cual viola las normas que rigen procesos como el que está enfrentando El Chapo.
En respuesta, Balarezo señaló al juez Brian Cogan que recomiende a la Fiscalía usar mejor los recursos del gobierno, en lugar de estar presentando “mociones frívolas”. Tsssss. Aparentemente los recursos ilimitados del gobierno permiten el lujo de perder el tiempo presentando mociones frívolas”, apuntó Balarezo que remató calificando de “patética” la reacción de la Fiscalía a sus tuitazo.