Lo vimos en The Wall y la realidad lo confirma: no hoy mejor forma de sacar las frustraciones, que arremeter contra el (aparentemente) más débil.
Al menos así le hizo el candidato perredista a la gubernatura de Chihuahua, Jaime Beltrán, quien, como no agarró hueso… pues regresó a chambear con toda esa rabia que le dejó el no ser de la simpatía de los votantes y quienes terminaron pagándola (sin deberla, claro), fueron los empleados de la alcaldía de Delicias, lugar donde despacha el susodicho.
Por lo anterior, empleados pertenecientes al sindicato de trabajadores realizaron una manifestación a las afueras del edificio municipal, apuntando que no nomás fue por el coraje que le dio el no llevarse la grande que el expanista corrió a la gente…sino que lo hizo para colocar a sus colaboradores de campaña.
En fin, la cosa se puso un “poco” subida de tono, ya que, ni porque los empleados tomaron las instalaciones, el alcalde se dignó a salir e intentar aclarar la situación… razón que, sumada a los despidos aparentemente injustificados, hace que ahora los trabajadores soliciten la renuncia de Beltrán y, con ello, el regresó de Rubén Borunda, quien despachaba en lo que el alcalde buscaba realizar su sueño gubernamental.
Según reporta Proceso, todo se habría calmado si el alcalde hubiera recibido a los quejosos, quienes solicitaban su compromiso a ya no correr a más gente, así como la restitución de quienes ya dijeron adiós… pero, ante su negativa, el respetable se tornó más enérgico y no dejaron salir al edil sino hasta seis horas después.
A final de cuentas, Beltrán se vistió de gloria y salió por la puerta trasera, cuidado por dos escoltas y con la duda de si en los próximos días le darán chance de chambear: los empleados ya tienen resguardada la puerta principal del edificio municipal.
Al respecto, el panismo de Chihuahua señaló que es muy manchado por parte del alcalde eso de andar con revanchismo, nomás porque su carisma no le dio para ganar la elección: “La autoridad municipal está actuando de forma irracional, con una actitud revanchista que raya en la locura y sin importarle la estabilidad y la gobernabilidad del municipio”, acusó Manuel Carreón, dirigente del PAN en Delicias.
Por su parte, los del PRD apuntaron que su excandidato fue secuestrado y lo que piden es que las autoridades actúen…no vaya a ser que la sangre manche el triunfo que la ciudadanía le otorgó a Javier Corral.