En 2012, los gobiernos de Jalisco, Guadalajara y el Federal anunciaron un ambicioso proyecto cuyo objetivo era incentivar el desarrollo industrial, tecnológico y educativo de la zona metropolitana. Se trata de la Ciudad Creativa Digital, que aún no está al cien, pero que durante todo su desarrollo ha tenido cuestionamientos. Y en este 2022, las protestas han tomado las calles y lo digital. ¿La razón?
Activistas por el derecho a una vivienda digna han denunciado que la Ciudad Creativa Digital y el plan para repoblar el Centro Histórico de Guadalajara no están comprometidos con los ejes que los gobiernos deben cumplir para garantizar viviendas dignas.
(De hecho, han denunciado que el proyecto tienen en la mira la construcción de depas de 35 metros cuadrados, a precios que seguramente se inflarán porque esta Ciudad Creativa Digital está pensada para atraer a personas extranjeras o de alto poder adquisitivo, dejando a la gente de Guadalajara sin una buena opción de vivienda o desplazándola).
Una situación un poco similar a lo que reclaman en CDMX, con el convenio entre el gobierno de Claudia Sheinbaum, la Unesco y Airbnb para incentivar la llegada de los/las nómadas digitales.
¿Qué es la Ciudad Creativa Digital?
Guadalajara es la sede de la Ciudad Creativa Digital, definida como una ciudad inteligente e integrada por una serie de complejos inmobiliarios.
El chiste de esta ciudad creativa es reunir negocios, oficinas, viviendas, escuelas y más en un solo complejo o bueno, una serie de complejos.
Se supone que estos complejos tienen que estar conectados entre sí para que la gente pueda moverse sin problemas en los llamados “ecosistemas de industrias“.
Y bueno, uno de sus objetivos es recuperar y renovar el Centro Histórico de Guadalajara.
Los mismos gobiernos de Guadalajara han explicado que esta Ciudad Creativa Digital —una ciudad dentro de la zona metropolitana— es un hub o un concentrador de las actividades económicas, sociales, educativas e industriales de este municipio de Jalisco.
¿En qué va?
Aún no está al cien, pero el proyecto ya tiene parte del primer complejo creativo —dedicado a empresas, negocios e instituciones educativas.
Peeeeeero, a la par hay planes para construir viviendas. En 2021, por ejemplo, se abrieron las licitaciones para cuatro desarrollos distribuidos en la Calzada Independencia y el Parque Morelos, ubicados en el Centro Histórico.
Cuando presentaron el plan de licitación, los gobiernos de Guadalajara y Jalisco hablaron de un espacio de casi cinco mil metros cuadrados, donde se preveía construir hasta 270 unidades habitacionales.
Ya para septiembre de 2022 comenzó la construcción de 355 departamentos en tres torres del llamado distrito creativo y ahora sí, avanzó lo que el gobierno de Guadalajara ha explicado como repoblación.
Es decir, que con la construcción de estos inmuebles, buscan que la gente regrese o comience a vivir en esta zona de Guadalajara.
Las protestas
En este contexto, la gente se ha movilizado para reclamar a los gobiernos un mayor compromiso en la construcción y el desarrollo de viviendas dignas.
Mientras, la Presidencia Municipal de Guadalajara (del empresario Pablo Lemus) defiende el proyecto como una cuestión de modernización para gente que no tiene familia y vive sola.
Pero acá, activistas han cuestionado: ¿qué pasa con los planes a largo plazo? Además, del golazo que el proyecto está metiendo a los vecinos y las vecinas. ¿Por qué?
En cuanto a los vecinos de los complejos de la Ciudad Creativa Digital, sólo será cuestión de tiempo ver si los precios de productos y servicios aumentan, conforme los inmuebles se ocupan —y también por quiénes serán ocupados, muy posiblemente, han señalado, por extranjeros o personas con buen poder adquisitivo (la gentrificación, le dicen).
Así que poco a poco los habitantes de estos sitios podrían ser —o han sido— desplazados por el proyecto en sí. En este contexto, recién el 30 de noviembre un grupo de activistas protestó contra el proyecto inmobiliario, exigiendo al presidente municipal Pablo Lemus mejores alternativas de vivienda.