La historia del coronavirus, y su impacto en la vida cotidiana ya la conocemos. Con todos encerrados en sus casas, y con el país en fase dos de contingencia, muchas industrias como la restaurantera se ha visto derrumbarse como nunca antes. A pesar de los incansables esfuerzos por brindar comida para llevar y a domicilio, las cuentas han terminado por rebasar cualquier esfuerzo de los restauranteros por mantener en operación sus negocios. Esta era la historia de Pedro Sañudo, dueño de un pequeño restaurante en la colonia Condesa llamado Antolina. Ahora, y con una corazonada de buena fe, lanzó la iniciativa #CocinarParaAyudar.
#CocinarParaAyudar es una iniciativa para lograr “sobrevivir siendo el puente entre los que pueden dar y los que necesitan recibir”. Con este proyecto, Antolina ya empezó las labores de darle de comer a los 40 niños y niñas de la Casa Hogar de la Fundación Renacimiento a través de pequeñas aportaciones de familia y amigos. Ante la crisis, esta fundación con 27 años en operación y que ha logrado atender a más de 2260 niños en situación de calle, vio muy de cerca no poderle proveer comida a sus niños.
Afortunadamente la iniciativa #CocinarParaAyudar llegó en el tiempo justo y ahora Antolina tiene los recursos para brindarles 120 comidas diarias durante 15 días. A través de la plataforma Donadora, Antolina ha lanzado una campaña para recibir donaciones (justo aquí) y poder ampliar este número por muchos días más. Las donaciones pueden ser tan sencillas como desde $162 pesos que le garantiza a un niño tres comidas, hasta la cantidad que gustes donar (ya sea menos o sea más). Pero como bien dice Sañudo: “todo suma en estos días”.
El objetivo de #CocinarParaAyudar no es algo propio de Antolina. Es realmente un modelo de negocio increíble que hoy es más necesario que nunca. Los esfuerzos de Antolina han llamado la atención de otras fundaciones y casas hogar que han pedido ayuda para poder seguirle dando de comer a sus niños.
Desgraciadamente sus esfuerzos solo se han podido limitar a la Casa Hogar de la Fundación Renacimiento, pero tienen bien en mente poder ayudar a todos los que les sea posible en un futuro cercano. Esta iniciativa también es una invitación para que otros restaurantes se sumen a esta forma de operación y así llevarle comida a miles de niños que la necesitan.