¿Quién pone el tururú? ¿A qué hora te levantas? ¿Alguien te ha tocado la ventana para corretearte? Sabemos que tienes mil y un dudas sobre el trabajo —y la vida— de un conductor del Metro. Por eso, aprovechamos nuestras bodas de oro con la limosina naranja para encontrar a alguien que pudiera responderlas.
En Sopitas.com pudimos conocer a Guadalupe Higinio Prado Jiménez, un conductor de la Línea 1 desde hace más de 40 años.
Junto a Higinio conocimos las entrañas de una de las primeras estaciones del Metro, la estación Insurgentes, que se inauguró hace exactamente 50 años, en septiembre de 1969. También recorrimos la Línea Rosa dirección Observatorio para pararnos justo en el túnel donde —durante el sismo de 1985— él tuvo que frenar su tren y ayudar a evacuar a todos los pasajeros.
Nos contó un rato sobre las desmañanadas que se ponen los conductores del Metro, los protocolos de seguridad y sí… también soltó un mensaje para todos aquellos que impiden el cierre de puertas.
Ustedes saben quiénes son.
No crean que fue coto nada más. También platicamos un buen rato sobre uno de los momentos más traumáticos en su línea de trabajo: los arrollados. Los intentos de suicidio en el Metro son una experiencia emocional para los conductores del Metro e Higinio abrió su corazón un buen rato para contarnos su experiencia y la de sus compañeros. “En su casa los esperan… igual a nosotros y esperamos llegar con bien”, meditó.
¡Échale un ojo al video!