Pues aunque ayer fue muy festejado y la noticia corrió por todo el mundo, resulta que siempre no… el expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva no saldrá en libertad y, por el momento, continuará preso, purgando la condena de 12 años en su contra por actos de corrupción.
Como ayer les informamos, el juez de apelación del Tribunal Regional Federal (TRF), Rogério Favreto, ordenó la liberación del expresidente Lula da Silva, sin embargo, el dictamen nunca se acató ya que el juez Sérgio Moro (responsable de llevar el Petrobras) puso en cuestión la competencia de Favreto para determinar la libertad del exmandatario, lo cual fue secundado por otra instancia… terminando el asunto en un ir y venir judicial que resolvió ayer por la noche el presidente del TRF) Carlos Eduardo Thompson Flores, presidente del tribunal: Lula da Silva permanecerá en prisión.
De acuerdo con O Globo, el presidente del TRF señaló que la situación del expresidente brasileño sólo es competencia de quien lleva el proceso, el juez Gebran Neto; es decir, no podía ser competencia de Rogério Favreto. En respuesta a lo determinado por Flores, el diputado federal autor del pedido habeas corpus atendido por Favreto, Wadih Damous, informó que la defensa de Lula da Silva rebatirá la decisión de Thompson Fores, ya que -según el legislador- el presidente del Tribunal no puede intervenir en la controversia que existe entre Gebran Neto y Favreto.
“La decisión de Thompson Flores es absurda, completamente ilegal. La competencia de Favreto sólo podía ser revocada por una decisión colegiada o de un tribunal superior. Esto muestra la anarquía del poder judicial”, señaló Damous. Favreto decidió la liberación de Lula da Silva después de analizar un pedido de habeas corpus presentado el viernes por la noche por tres diputados federales del PT.
De ser cierto lo apuntado por Damous, la permanencia de Lula da Silva es injusta. Luego que Sérgio Moro cuestionara la competencia de Favreto para juzgar el caso, señalando que las autoridades policiales no deberían seguir la determinación hasta que el encargado del caso Lava-Jato, Gebran Neto se manifestara… éste así lo hizo, indicando que Favreto era el responsable natural de todas las decisiones. Así, el juez Favreto reiteró su posición e, incluso, dio un plazo de una hora para dejar en libertad a Lula Silva.
Sin embargo, los contrarios a dejar en libertad al expresidente acudieron al presidente del TRF, Thompson Flores, y éste acabó por dar la última palabra.