Este viernes con 56 votos a favor y 0 en contra, el pleno del Congreso de la Ciudad de México aprobó la Ley de Austeridad, Transparencia en Remuneraciones, Prestaciones y Ejercicio de Recursos de la capital.

A partir de que se publique en la Gaceta de la Ciudad de México, ningún funcionario va a poder ganas más de lo que la Jefa de Gobierno, es decir, más de 104 mil 911 pesos al mes.


De igual forma, los funcionarios ya no podrán cargar al erario la contratación de seguros de gastos médicos privados, ni seguros de vida, ni la compra de boletos de primer clase para realizar viajes oficiales, así como tampoco se usan las escoltas y los vehículos blindados.

Además, los servidores públicos se deben abstener de contratar plazas de secretarios públicos, con excepción del jefe de Gobierno, los titulares de las dependencias, magistrados y órganos autónomos.

En el caso de los seguros de gastos médicos, se permitirá la contratación sólo a aquellos que trabajen en áreas relacionadas a la seguridad pública, gestión de riesgos y/o servicios de emergencia.


Y no es todo. En esta ley se agregó el delito de remuneración ilícita, mismo que aplicará cuando un servidor público apruebe pagos de remuneraciones o retribuciones que no estén autorizados conforme la ley. Si esos pagos no fueron reportados también están prohibidos.

El castigo va a ir desde la inhabilitación de sus funciones, retiro del cargo y hasta cárcel.

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