Kåre Halvorsen, ingeniero de origen noruego, es un gran fanático de la robótica. Un pasatiempo que desde hace unos años lo ha llevado a construir una serie de robots hexápodos y de los cuales, éste es su última creación.
Se trata de un autómata basado en un PhantomX de Trossen Robotics, a partir del cual Halvorsen ha ido añadiendo y modificando componentes, hasta lograr una importante mejoría en su equilibrio y velocidad.
Además del hardware, el noruego ha usado el código Phoenix para lograr mejores resultados en los movimientos de este robot araña. De tal forma que el dispositivo es capaz de desplazarse por distintos tipos de terreno e incluso cambiar de posición, según su caída. Todo por un costo de construcción que ronda los 2,000 dólares.
Un trabajo realmente impresionante, aunque luego de ver el video de demostración, la verdad es que el PhantomX también puede resultar un tanto aterrador. Creo que a nadie le gustaría ser perseguido por uno de estos:
Enlace: Robot-kits