Este 2 de octubre se cumplieron 52 años de la matanza de Tlatelolco, y en el marco de la conmemoración de ese lamentable suceso, Alejandro Encinas anunció que retirarán los nombres de los “represores” de ese y otros oscuros episodios de nuestra historia, en lugares y obras públicas de todo el país. La noticia por supuesto que nos alegra, pero parece que no será tan fácil. Claudia Sheinbaum dijo que, al menos en la CDMX, deben primero consultarlo con los vecinos.
La jefa de Gobierno encabezó hoy una visita a la construcción de un nuevo plantel del Instituto de Educación Media Superior de la CDMX (IEMS), y en la sección de preguntas y respuestas de la conferencia de prensa, no podía faltar aquella donde le cuestionaron cómo se aplicaría en la Ciudad de México lo anunciado por el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración.
“Diversas cuestiones impiden que los vecinos acepten”: Sheinbaum
Fue en ese momento cuando Claudia Sheinbaum indicó que se tiene tooooda la intención de cambiar los nombres a calles y colonias que recuerdan a los “represores” del 68 y otros episodios históricos, pero para llevarlo a cabo, primero deben consultarlo con los vecinos porque es todo un desma… desorden, hacerlo.
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“En algunos casos cuando hay por ejemplo cambio de nombre de calle o de colonia, se tiene que consultar con los vecinos y vecinas. En algunos casos los vecinos no quieren cambiar porque significa modificación de escrituras y cuestiones de este tipo“, indicó Sheinbaum.
Claudia Sheinbaum recordó un ejemplo sucedido en Tlalpan, en el que los vecinos de plano no aceptaron que se cambiara el nombre de una calle, aunque no especificó cuál calle ni el motivo de que se buscara el cambio en aquel entonces.
Pero por lo anterior, señaló que antes de poder anunciar cualquier renombramiento en calles o colonias de la CDMX, debe consultarse primero con la población. Puso como ejemplo a la colonia Nueva Díaz Ordaz, en Coyoacán, de la cual mencionó que los vecinos sí están interesados en quitarle ese nombre a su colonia, así que por ahí podría estar más fácil el cambio.
Finalmente, la jefa de Gobierno señaló que el renombramiento y colocación de placas en varios lugares públicos de la CDMX no sólo se haría para retirar nombres de “represores”, también se llevaría a cabo para conmemorar los 700 años de la fundación de Tenochtitlán y los 200 años del México independiente.