Para que vean que dondequiera hay políticos de este calibre. Aunque para la mayoría de la comunidad internacional las revelaciones de los métodos de tortura efectuados por agentes de la CIA resultan por demás manchados, siempre habrá quien salga en su defensa… y peor aún, asegurando que los interrogatorios bajo tortura “funcionaron a la perfección”.
El encargado de tales declaraciones no es cualquier político. Se trata de Dick Cheney, ex vicepresidente de los Estados Unidos durante el mandato de otro maestro de las declaraciones: George W. Bush.
“Estoy perfectamente convencido: [los agentes] deben ser glorificados, deben ser condecorados”, comentó Cheney al más puro estilo del ex secretario de Seguridad Pública del DF.
Hace unos días se informó al Senado de los Estados Unidos de las sistemáticas torturas que los agentes de la CIA llevaban a cabo contra aquellos que consideraban sospechosos de terrorismo. Pese a que en el informe se señala que las “calentaditas” que proporcionaron no sirvieron para obtener información valiosa, el ex vicepresidente asegura que los interrogatorios “funcionaron a la perfección”…
“La tortura es lo que los terroristas de Al Qaeda hicieron a 3.000 estadounidenses el 11-S (…) no hay comparación entre eso y lo que hemos hecho con respecto a mejorar nuestros interrogatorios”.
Aplicando el “no me ayudes compadre”, Chaney remarcó que el presidente Bush estaba enterado de la forma en que la CIA le sacaba la sopa a quienes consideraba “prudente”: “Él sabía lo que estábamos haciendo, lo autorizó, lo aprobó”.
Respetuoso como sólo él puede ser, Cheney consideró que el informe que reveló las prácticas de la CIA estaba “lleno de mierda (…) Creo que este informe es deplorable. Parece muy imperfecta. No se molestaron en entrevistar a personas clave que participan en este programa”… Pero si se van a poner así, para qué les preguntan.