Quién sabe si hará uso del poder que todavía tiene, pero Elba Esther Gordillo no pierde oportunidad de presumir que todavía las puede. Así se lo hizo saber al secretario general del SNTE, quien se atrevió a insinuar que La Maestra no puede aspirar a la dirigencia sindical por no pagar sus cuotas.
Y rápido Gordillo dijo “cómo fregados no”. Bueno, no así, pero sí de una manera muy parecida. Por medio de sus recién estrenadas redes sociales, la exlíder sindical negó estar inactiva del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), como aseguró el secretario general de éste, Alfonso Cepeda Salas.
“En la democracia se gana con votos. Los maestros y maestras del SNTE siempre han sido ejemplo de democracia sindical. Vigentes y plenos mis derechos políticos, ciudadanos, y sindicales”, escribió Elba Esther Gordillo en su cuenta Twitter.
Este fin de semana, Cepeda Salas señaló que Gordillo está impedida por el momento para aspirar a dirigir el SNTE… no porque tenga un negro historial que a muchos haría pensar dos veces antes de colocarla otra vez como lideresa del magisterio, sino porque no ha pagado sus cuotas y, por lo tanto, no están vigentes sus derechos sindicales.
“Hay un rezago muy importante en el entero de la cuota sindical a nuestra organización”, explicó Cepeda, aclarando que nomás será cuestión de que Gordillo se ponga al corriente en sus pagos para volver a ser activa dentro de las filas del SNTE. “A condición, insisto, de que estén al corriente de su cotización sindical”.
Pero cuál… al parecer Elba Esther Gordillo no tiene la mínima intención de pagar ninguna cuota y presume que todos sus derechos están más que activos.
Hasta el momento, Gordillo no ha dado señales claras de querer recuperar el liderazgo del SNTE. En abril pasado medio lo insinuó al comentar que quizás es momento de que el magisterio “piense en una nueva forma de representación sindical”… pero de ahí no ha pasado.
Total… con o sin dirigencia sindical, parece que este 2020 andará muy activa con las Redes Sociales Progresistas (RSP), grupo encabezado por su yerno y que muy posiblemente alcance su registro como partido político.