Ya que en las pasadas elecciones federales no fueron muy populares los kits escolares que repartió su partido, ahora el diputado Rafael Guirao Aguilar le dio la vuelta al asunto y optó por incentivar el trabajo infantil.
El legislador chiapaneco por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) realizó la semana pasada un magno evento en el que se lució como los grandes estadistas y mandó a niños y jóvenes a sacarle brillo a los “papos” de la gente de Tapachula… claro, no los envió desprotegidos a la guerra: les dio a cada uno un finísimo cajón para bolear con el respectivo logo de su partido.
“El día de hoy (domingo) en el 2do Aniversario del Comedor Popular en Tapachula tuve la oportunidad de compartir el pan y la sal con familiares de pacientes internos en el Hospital General de esta ciudad emblemática de la Costa Chiapaneca. Ahí realicé la entrega de apoyos funcionales como sillas de rueda, andaderas y bastones a los que más lo necesitan, así también entregamos cajitas boleadoras a jóvenes que se dedican a esta noble actividad”, presumió el diputado en su cuenta de Facebook.
El detallazo corrió por cuenta de la “Fundación Chiapas” -de la cual Guirao Aguilar es presidente-, organización harto sensible con el hecho de que en su estado cerca de 165 mil niños y jóvenes entre cinco y 17 años de edad tienen que trabajar.
Aunque otras organizaciones (como Todo por Ellos, el Movimiento Migrante Mesoamericano y Familias Latinas Unidas) han denunciado que la mayoría de los niños que laboran en las calles (boleando zapatos, por ejemplo) son víctimas de abuso de autoridades y de explotación, eso no fue impedimento para que Guirao entregara los cajones…
Lo que no checó bien el diputado es que según estadísticas, el 74% de los menores que trabaja en Chiapas, lo hace en el sector agropecuario, servicios y comercios… así que para la próxima quizás sea mejor regalar azadones o palas. Pues para qué mandarlos a la escuela, si los chavitos ya encontraron su vocación.