En un desesperado movimiento por revertir la tendencia negativa de su discurso —siete de cada 10 ciudadanos estadounidenses están en contra del virtual candidato republicano, según un sondeo realizado por The Washington Post y la cadena ABC—, Donald Trump ha decidido prescindir de Corey Lewandowski, su polémico jefe de campaña.

Lewandowski es conocido por agredir a una reportera durante un acto electoral, además de proponer el discurso demagogo, (que algunos consideran racista y misógino) que ha caracterizado la carrera de Trump rumbo a la Casa Blanca.

Con este cambio, Don Donnie busca redefinir su postura porque las críticas no dejan de lloverle,  incluso desde el seno de su propio partido, respecto a su durísima política de migración. Trump quiere modificar la impresión que deja ante los votantes para hacerla más recatada, suave y “presidencial” durante la campaña de otoño, que culminará con las elecciones del 8 de noviembre.

Trump ha tocado su punto más bajo de aprobación desde que amenazó con postularse se postuló a la presidencia de Estados Unidos, donde 70% del electorado lo ve con malos ojos y 56% lo rechaza fuertemente (no way, José).

La guerra civil al interior del equipo de Trump empezó, según el empresario multimillonario, cuando dos de sus principales consejeros de campaña, Paul Manafort y Corey Lewandowski, y sus respectivos equipos, pelearon por tener mayor influencia y poder dentro del grupo.

Las versiones, relatadas por parte del staff de Trump e integrantes del GOP (Grand Old Party) a CNN, apuntan a que el conflicto nació cuando Trump nombró a Manafort como estratega superior de campaña en marzo de 2016, dejando de lado al equipo que lo acompañó la mayor parte del proceso, liderado por Lewandowski.

¿Creen que este movimiento, a última hora, sea capaz de borrar todo lo que ha dicho Trump en el último año?

vía CNN, El País

Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com

Comentarios