Este país es una nota del Deforma que nunca se acaba. Cuando uno piensa que no puede suceder algo más increíble y ridículo, la realidad nos da un portazo en las narices y nos receta una nueva dosis de inverosimilitud. El pasado domingo 28 de mayo sucedió una de esas historias que son difíciles de creer. Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México detuvieron a 10 personas que se resguardaban en una vecindad de Tepito tras provocar una balacera en el cruce que forma Eje 1 Norte y la calle de Tenochtitlán. Los tiradores lesionaron a tres personas y se guarecieron en el complejo. La policía montó un operativo —en el que participaron cerca de 200 oficiales— para arrestarlos. A la hora que entraron a la construcción, los agentes encontraron un cargamento de mochilas negras de UberEats y un par de bolsas termostáticas cargadas con droga.  

En el operativo se aseguraron cerca de 300 kilogramos de marihuana, de acuerdo con Víctor Hugo Ramos, jefe del Estado Mayor Policial. Los detenidos —ocho adultos y dos menores— fueron puestos a disposición del Ministerio Público de la Procuraduría General de la República (PGR). De acuerdo con reportes periodísticos, este es el modus operandi que están implementando algunos narcomenudistas que se mueven en zonas como la colonia Roma, Condesa, la Zona Rosa y otras áreas de la delegación Cuauhtémoc. Los vendedores de droga utilizan como fachada las mochilas de UberEats para distribuir sus productos y pasar desapercibidos. Estas fundas, indicaron las autoridades, no están seriadas y, por lo mismo, pueden ser adquiridas fácilmente en internet. Se trata del primer caso documentado de una triquiñuela de esta naturaleza.

Al parecer, a muchos no les van a llegar sus ensaladas.

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