Al más puro estilo de político priista, el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Raúl Plascencia Villanueva inaugura obras con su nombre, ejerciendo su derecho humano al elogio.
De 2012 a la fecha, el Ombudsman nacional ha inaugurado un busto, un auditorio y cátedras universitarias que llevan su brillante nombre: Raúl Plascencia Villanueva.
Por ejemplo, la Escuela Libre de Derecho de Puebla mantiene vigente la cátedra que lleva el nombre del presidente de la CNDH, institución de la que es profesor honoris causa y docente de posgrado.
En 2013 se develó una placa con su nombre en el salón de usos múltiples de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla, “en alusión al trabajo desempeñado por el presidente del organismo defensor a nivel nacional”. Al evento asistió el Gobernador poblano, Rafael Moreno Valle.
En este año la Facultad de Derecho de la Universidad Panamericana del Distrito Federal inauguró una cátedra que lleva su nombre que se imparte en noveno semestre y donde Plascencia Villanueva dicta las conferencias inaugural y de clausura.
El 18 de octubre de 2012 se inauguró el Instituto Superior de Derechos Humanos Dr. Raúl Plascencia Villanueva, en presencia del Ombudsman, quien develó también un busto en su honor, pues la escuela señaló que el nombre del nuevo Instituto era un reconocimiento a la contribución de Plascencia a los derechos humanos en México.
Pese a estos reconocimientos que ha recibido Raúl Plascencia Villanueva y después de 15 años de vida de la CNDH, este organismo aún no tiene la capacidad de atender los reclamos de la sociedad civil. Los reportes sobre abusos de derechos humanos cometidos por la policía y las fuerzas de seguridad, incluyendo desapariciones forzadas, tortura y detenciones arbitrarias continúan.
Vía: Reforma