Pasar 8 horas o más frente a una computadora, escuchar todo el día los gritos de tu jefe y poder entrar a Facebook cuando queremos, son algunos de los motivos por los cuales se pierde la concentración con facilidad.

Existen estudios que aseguran que nuestro punto más alto de atención está apenas en las primeras horas del trabajo, por lo que muchas veces estar tanto tiempo en una oficina es innecesario. Aunque en otras tantas ocasiones es vital que estemos ahí y que hagamos las cosas lo mejor posible.

Fue así que la revista L’Express de Francia, reveló una entrevista que le realizó a Jean Dugay, un especialista en la formación y estructuración de empresas, en donde este revela algunos fáciles ejercicios con los que cada trabajador puede recuperar la concentración que es necesaria en la oficina.

Así que si ustedes son de esos dispersos que a la menor provocación se ponen a platicar con el de a lado, que esperan que el patrón no los vea para abrir YouTube o Facebook para andar en el chisme o cualquier cosa de ese estilo, chequen estos consejitos que a nadie le caen mal.

Entrenar nuestra concentración

Dicen por ahí que para ser, hay que parecer. Y sin lugar a dudas esto es cierto, ya que una de las formas de lograr estar enfocados cien por ciento es mentalizar lo que haremos: “tengo que sacar bien estas cuentas”. “Tengo que sacar bien estas cuentas”. Todo el tiempo eso debe estar en nuestra cabeza, sino de lo contrario hay altas posibilidades de que algo salga mal.

hombre-escritorio

La respiración es vital

Cuando estamos alterados por alguna situación nuestro ritmo cardíaco comienza a acelerarse, nos volvemos locos y muchas veces no nos damos cuenta de cómo hacemos las cosas. Para contrarrestar esto tenemos que darnos unos minutos, sentarnos cómodamente en nuestro lugar, inhalar y exhalar a un ritmo tranquilo mínimo diez veces y lograr que todo se regularice, eso funcionará.

¿La vista perdida?

Ver detenida y fijamente un objeto puede ser de utilidad. Esto, mientras no sea algo que les traiga algún recuerdo malo o bueno, funcionará, ya que nuestro cerebro se enfocará en su totalidad en eso, en por qué esa taza está sucia y dejará por algunos minutos de lado la problemática del escritorio. Así que si su jefe se les queda viendo morbosamente, es porque está distraído, tiene que focalizarse.

Música para nuestros oídos

Escuchar música no nada más sirve para no poner atención a los demás, para hacernos los sordos cuando el jefe nos habla, sino también para encontrarnos con un estado de ánimo positivo el cual nos servirá para rendir mejor. Procurar melodías tranquilas o de nuestro agrado es lo ideal. Olviden esas de Metallica o algo parecido.

audifonos

El tiempo puede ser oro

Suele pasar que el jefe nos avise en la noche que mañana hay una junta muy importante para ver algún tema con los socios. Es indispensable que estemos ahí y con buena cara. Para que esto suceda el consejo es tomarse todo el tiempo del mundo: despertar temprano, salir un poco a tomar aire fresco, no ir con el tiempo contado, ya que todo esto elevará su grado de estrés y seguro tendrá una mala cara a la hora buena.

Visualización

Creemos que todo es muy fácil, que no necesitamos prepararnos para algunas situaciones, pero cuando llega la hora, se nos caen los chones. Así que para estar más seguros de lo que haremos, es importante visualizar cómo y qué es lo que sucederá frente a alguna situación, si hablaremos en público, qué le diremos al jefe de nuestro retardo, en fin, siempre saber cómo reaccionar ante algún problema.

Posiblemente estos consejos ya los hayan puesto en marcha, ya los conozcan o simplemente los hagan sin más, pero si no los conocían y el lunes tendrán un día pesado, comiencen a practicar.

***Vía Infobae

Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com

Fundé Sopitas como hobby y terminó siendo el trabajo de mis sueños. Emprendedor, amante de la música, los deportes, la comida y tecnología. También comparto rolas, noticias y chisma en programas...

Comentarios

Comenta con tu cuenta de Facebook