Uno de los encuentros más legendarios de la NBA fue el quinto partido de las finales de 1997 entre los Bulls de Michael Jordan y el Jazz de Stockton y Malone. Éste se jugaría entre la incertidumbre de no saber cómo estaría físicamente el 23 debido a una supuesta gripe.
Llegó la hora y la balanza se inclinó hacia el equipo de Chicago gracias a una actuación casi mágica de Michael Jordan, quien anotó 38 puntos, repartió 5 asistencias y capturó 7 rebotes, posicionando de esta forma a los Bulls a una sola victoria del que sería su quinto título NBA. Ni enfermo, el mejor basquetbolista de todos los tiempos pudo ser frenado.
Aquellas zapatillas consideradas mágicas, fueron vendidas este jueves por más de 100 mil dólares en una subasta por internet. Los Nike Air Jordan XII eran propiedad de un recogepelotas del Jazz de Utah, quien se hizo amigo del escolta cuando los Bulls visitaban Salt Lake City.
Preston Truman, el afortunado dueño, dijo que al finalizar dicho partido, se acercó al exjugador para pedirle sus tenis para el recuerdo a lo que MJ accedió sin pensarlo. Éste las mantuvo guardadas como si se tratara de un tesoro durante 15 años, a pesar de haber recibido ofertas previas.
La subasta comenzó en 5 mil dólares y finalmente, cerró en 104 mil 765 billetes verdes, dijo Michael Russek, director de operaciones de la casa de subastas Grey Flannel, en Westhampton, Nueva York.