El viento, ese elemento de la naturaleza de cuyo poder no siempre somos conscientes, causó estragos en las costas portuguesas, en donde la fuerza de un huracán incluso desbarató un estadio.
Hace unos días, un huracán provocó destrozos y dejó varias personas heridas en las localidades costeras de Lagoa y Silves, ubicadas a unos 250 kilómetros de Lisboa.
Según datos de la BBC, fueron 13 las personas lesionadas, de las cuales tres son reportadas como graves. A causa del fuerte viento, 4,600 personas de la zona se quedaron sin luz.
“Empezó a llover mucho y a soplar un fuerte viento. El suelo se empezó a mover. Sujeté la ventana y de repente reventó en mis manos, todo se metió dentro de la casa. La tengo completamente destrozada”, comentó uno de los afectados.
En la zona turística de Algarve, una persona grabó con su cámara el momento cuando el estadio Dr. Francisco Vieira es destrozado por el impacto del viento. La escena es impresionante: