Uno puede imaginarse que una de las peores experiencias en la vida es ir a prisión. Cualquiera que pueda acceder a algún testimonio de alguien que haya ido a prisión conocerá, aunque sea superficialmente, la manera que afecta a una persona estar en el encierro y la imposibilidad de la defensa legítima, la frustración y la nostalgia… esto podría ser más duro si tu encierro consiste en no ver la luz de sol 23 horas del día. Eso le pasa a los plagiarios en Chihuahua.
Sabemos que nadie podría hacerse una idea de lo que significa vivir en reclusión, aún así cualquiera podría tratar de imaginarse lo terrible que podría ser pasar 23 horas diarias en severo confinamiento y sólo poder disfrutar del sol una hora al día dentro de una jaula gigante.
Pues según Reforma, así es como viven desde 2010 los plagiarios en Chihuahua. Lo hacen con el fin de impedir que estas personas recluten a otros reos para hacer actividades ilícitas, lo que, según dice el rotativo, podría haber ayudado a inhibir la industria del secuestro en la entidad.
De acuerdo con cifras de la Fiscalía Estatal, el número de plagios se ha reducido un 91 % al pasar de 130 casos en el 2010 a 32 en 2013, y a sólo uno en lo que va del 2014.
De acuerdo con esa Fiscalía, para estas fechas el año pasado ya se habían registrado 14 secuestros.
Además, las fugas y los motines se han reducido a cero. Esto último se debe a que los internos son severamente penalizados en sus privilegios de visita familiar en caso de caer en una transgresión.
Fue el 21 de octubre del 2010 el día en el que el Congreso de Chihuahua aprobó por unanimidad una reforma al artículo 32 del Código Penal Estatal. Ahí establecieron prisión vitalicia por delitos de secuestro, extorsión y homicidio múltiple.
Así que los sentenciados ahora cumplen su condena en un confinamiento diseñado exclusivamente para secuestradores dentro del Centro de Readaptación Social Número 1 en la capital chihuahuense.
La estructura de ese edificio fue readaptada para recluir exclusivamente a plagiarios. Al principio sólo la ocupaban 130 reos, pero el 10 de marzo pasado llegaron otros 527 más.
Con la institución de este penal, Chihuahua se convierte en la primera entidad en cumplir con el Acuerdo de Reclusión Especial como Combate al Secuestro, establecido en la última reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores.
El Gobernador César Duarte expresó al respecto:
«Chihuahua cumple la estrategia de concentrar en un solo penal a los secuestradores, pero en breve se logrará que también se concentre a los extorsionadores, en estas instalaciones en donde existen inhibidores de señal»
«Desde aquí, ni Chihuahua ni otro estado estará siendo víctima de la actividad delincuencial desde este centro penitenciario»
Según Reforma, desde que se aprobó la prisión vitalicia para plagiarios, el número de denuncias descendió, de 130 del 2010 a 97 en 2011, 53 en 2012, 32 en 2013 y 1 en lo que va del 2014.
Pero que bajen las denuncias no implica que bajen los delitos, sólo implica..bueno, eso, que bajan las denuncias. Eso puede tener muchas explicaciones, la principal es que los delincuentes amenacen más severamente a las víctimas para que estas no recurran a la policía. Pero bueno, esto no quiere decir que no nos alegraría que bajen los índices de este tipo de delitos, solo queremos señalar que se necesita de algo más para llegar a esta conclusión. Se necesitaría más indicadores para poder afirmar tan determinadamente que este delito está prácticamente erradicado de la entidad.
Prisión vitalicia
Por un lado está recurrir al castigo ejemplar para exterminar cierto tipo de prácticas delictivas, pero ¿qué significa un castigo como el de la prisión vitalicia? Si es un castigo ejemplar para evitar una práctica ¿no estamos utilizando la vida de alguien para que la sociedad tome la lección y sus individuos no recurran a este tipo de acciones? Es decir, privamos a alguien de ser libre, nunca volverá a estar afuera en toda su vida, para que los demás aprendamos a no secuestrar…o más bien, para que los demás temamos secuestrar pues no queremos sufrir lo mismo.
Parece que se pierde el carácter correctivo de la cárcel con este tipo de sanciones, parece que, según esta actitud, el que nace para secuestrador así se queda (porque hay que distinguir la práctica de aislamiento de la prisión de por vida, una cosa es aislar definitivamente a una persona para que no ejerza cierto influjo en otros prisioneros o en el exterior y otra es dejarlo ahí de por vida). La cárcel no es ya un centro de readaptación ni un lugar en donde los delincuentes tienen la oportunidad de pagar su deuda con la sociedad perdiendo su libertad pero ganando su reinserción.
Parece algo muy simplón lo que estamos exponiendo, pero de verdad es interesante ponernos a pensar qué significa este tipo de sanciones. Parece que la sociedad ya no quiere intentar corregir, sólo quiere apartar a los individuos que le hacen mal, desaparecerlos como si fueran una cosa aparte creada ex nihilo de la cual no hay que responder (hacerse responsable). Las penas de por vida son un tema que debemos discutir.