Aunque fueron detenidos los elementos que participaron en la tortura a una joven, la cual fue grabada y difundida en las redes sociales y a los pocos días de esto, el titular de la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) pidió disculpas públicamente, algo le falta al Ejército para limpiar su nombre. Al menos es lo que parece, ya que Salvador Cienfuegos no pierde oportunidad para resarcir la deteriorada imagen de la institución.
Durante su participación en la ceremonia conmemorativa del “rompimiento del sitio de Cuautla” (dato para la plática Godínez: ocurrido en 1812), el secretario sacó el tema a relucir, asegurando que, en el Ejército, aquellos elementos que no cumplen con su deber como se debe, son llamados a rendir cuentas con las justicia… militar, claro.
“[Nuestro] deber lo asumimos con voluntad y terminación teniendo como principio en el cumplimiento de nuestras misiones que la vida humana y el respeto a su dignidad son bienes supremos a proteger. Esta es la premisa que día con día guía el actuar de las y los militares que se entrega a la patria por el bienestar de sus conciudadanos. Aquellos que se han alejado de este principio han sido llamados a rendir cuentas ante la justicia”.
El carismático militar señaló que el compromiso de las fuerzas federales es velar por la seguridad y bienestar de los mexicanos.
Por su parte, en el evento estuvo presente el gobernador de Morelos, Graco Ramírez, quien no dejó pasar la oportunidad para elogiar el papel del Ejército en las labores que se le encomiendan… y no nada más de ahorita, sino de tiempo atrás.
“Con el esfuerzo de cada uno de los mexicanos en la sociedad, en los gobiernos y en las Fuerzas Armadas, alcanzaremos en conjunto impulsar esta Nación que nos vio nacer y nos ha dado todo lo que somos, para seguir siendo el gran País que es México en la comunidad internacional, y lograr la prosperidad y bienestar de las familias mexicanas”.