Cuando se empieza en un trabajo, siempre hay señales de cómo irán las cosas en el futuro. Aquí la cosa no pinta muy bien que digamos.
Sólo son algunos puntos del país en los que tiene presencia la nueva fuerza de seguridad del país, la flamante Gendarmería Nacional, cuyo objetivo es fortalecer el control territorial, proteger la seguridad de las personas y sus bienes, y resguardar sus fuentes de trabajo… Aunque las autoridades señalan que su idea es que este grupo sea alejado de lo militar y más cercano a la sociedad civil, lo cierto es que su llegada no ha sido bien aceptada.
Luego de que el día lunes se diera a conocer el despliegue de elementos de la Gendarmería Nacional en los estados de Baja California, Chiapas, Jalisco, Tamaulipas y Guanajuato, ahora nos enteramos la acogida que tuvieron en este último estado, en particular en Irapuato, donde una de sus elementos en su primer día de labores fue levantada por un grupo criminal.
Mientras se encontraba en una camioneta oficial del Centro de Comunicaciones (Cecom), la cual le fue designada para realizar labores de “análisis e inteligencia”, Liliana Chávez Vázquez fue interceptada por dos vehículos de los que descendieron sujetos quienes la bajaron de su unidad, para posteriormente llevársela en una de sus camionetas… un claro “levantón”.
Según testigos, Chávez Vázquez opuso resistencia. Tras llamar al 066 hicieron aparición elementos de la policía municipal, quienes sólo encontraron la camioneta encendida, con las portezuelas abiertas y un mensaje para los recién llegados: “Valen verga sus operativos. Fuera la gendarmería”.
Cuando se inició el despliego de la Gendarmería Nacional, la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) informó que uno de sus objetivos es generar condiciones de seguridad en aquellos puntos en lo que la delincuencia organizada amenace la vida, libertad, integridad y patrimonio de las personas… sin embargo, muchos son los críticos que apuntan que este nuevo grupo de seguridad tiene enfoque castrense, con lo que contribuye a la militarización del país.
“Refuerza la noción de seguridad ‘del Estado’ (por encima de la seguridad de la población) y la exime de dos componentes vitales en las políticas de seguridad: la prevención y la protección de derechos”, señaló en su momento el Fundar, Centro de Análisis e Investigación, en el documento El debate entre políticas de seguridad, democracia y derechos humanos: El caso de la nueva Gendarmería Nacional.
Cual sea su objetivo –aunque se inclina más al militar- la Gendarmería se ve que no la tendrá nada fácil. Por lo pronto, respecto al secuestro de la agente Chávez, el presidente municipal de Irapuato, Sixto Zetina, aseguró que se realizaban labores de búsqueda y se mantenía contacto con la familia de la gendarme, pero hasta el momento “no hay llamadas” de los captores.
Aun con el mensaje dejado en la camioneta de la mujer, Zetina se negó a ofrecer hipótesis respecto al móvil del secuestro: “No podríamos precisar nada, no soy la autoridad competente. Hay temas que no puedo decir yo”.