Encontraron una ofrenda prehispánica en la zona arqueológica de Palenque, Chiapas.
Según los investigadores del INAH, este hallazgo es la prueba de que hace 1,500 años un alto personaje maya fue enterrado en la cámara principal de la tumba del Templo XX de Palenque, en Chiapas. El hallazgo se compone de 2 centenares de piezas de piedra verde, jade, pirita y obsidiana, entre ellas 70 teselas que conformaron 2 máscaras y rica vajilla funeraria.
Para los investigadores que colaboran en este proyecto del INAH, se han abierto nuevas incógnitas sobre este espacio funerario ante la ausencia del entierro principal, fechado en las proximidades de la fundación de la dinastía palencana, hacia 350-550 d.C., en el periodo Clásico Temprano.
Los especialistas piensan que los restos mortales fueron exhumados y trasladados a otro lugar, una práctica conocida y documentada en tumbas no sólo de Palenque, dejando el ajuar que le acompañaba.
