Las autoridades de la CDMX ya se dieron cuenta que el exdirector del Instituto de Vivienda (INVI), Raymundo Collins, ya no es tan localizable que digamos, así que ya pidieron a la Interpol que les eche la mano. Ahora el exfuncionario es buscado en 194 países.
Todavía a inicios de diciembre de 2019, la fiscal Ernestina Godoy presumió que el también extitular de Seguridad de la CDMX estaba ubicado. Bueno… ahora sabemos que ni tanto: se procedió a localizarlo en tres domicilios distintos, pero nada. Así que ahora que todo apunta a la fuga del susodicho, se procedió a solicitar ficha roja a la Interpol, para ver si de pura casualidad aparece.
De acuerdo con lo que dictan los protocolos, en caso de ser ubicado fuera de México, Raymundo Collins podrá ser detenido con fines de extradición. Sin embargo, bien que se podrá defender… ya que la acusación que pesa en su contra no amerita prisión preventiva.
El ex del INVI y de la Secretaría de Seguridad de la CDMX es buscado por la ley para que enfrente los cargos que pesan en su contra, por el delito de uso ilegal de atribuciones y facultades. Según las investigaciones, Raymundo Collins y otros exfuncionarios del INVI habrían incurrido en actos de corrupción al solicitar a constructoras que se pusieran a mano por cada contrato “ganado”.
La jefa de gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, confirmó que se sospecha que Raymundo Collins habría participado en el desvío de millones de pesos que iban a ser utilizados para las tareas del INVI: construcción de viviendas.
Ahora se sabe que, antes de que saliera a la luz la investigación en su contra, Collins ya tenía conocimiento del asunto. Tanto que hasta tramitó un amparo contra cualquier orden de detención. Evidentemente no se le concedió el recurso, así que emprendió la graciosa huida.