Sabemos que les gustan los chismes, que de vez en cuando ojean el TV Notas y que a veces “solo porque no hay otra cosa a la hora de la comida” ven un rato de “Ventaneando”. Por eso es que no dejamos nuestra querida y no oficial sección de Fíjate Paty.
Y bueno, en esta ocasión les traemos una noticia que es un poco triste, a nadie le gustan las muertes (aunque no hayan conocido a la persona).
Todos conocemos la historia de Britney, la sexy colegiala que a principios de los 2000 le alboroto la hormona a mas de uno o una. Después se le safaron varios tornillos y como buena niña Disney (si no vean a la Miley y a Selenita Gómez), se volvió un poco loca y drogadicta y alcohólica y hasta pelona.
Ok ya ya, no nos burlaremos de ella.
Después entró a rehabilitación y ahí conoció a un piloto, John Sundahl, que también estaba luchando contra el problema con la bebida en Alcohólicos Anónimos, y aunque nunca fueron una pareja oficial, si salieron varias veces y quedaron como amigos, según información de The Mirror.
El día de ayer la cantante recibió la noticia de que Sundahl, había muerto cuando un misil alcanzó su helicóptero, esto mientras estaba de servicio en Afganistán.
Según muchos allegados a la artista, está devastada, ya que eran buenos amigos. Por suerte tiene a su novio, Charlie Ebersol, para que la consuele y ya no se nos vuelva a poner loca.
Y para que se les quite la tristeza por el Blue Monday, qué mejor manera que recordar uno de los mejores momentos de la Britney: