doce muertos y al menos 79 heridos es el saldo que dejó un gran incendio en la Grenfell Tower de Londres, un edificio de 27 pisos en el que se calcula vivían 120 familias.
De acuerdo con los primeros reportes, el incendio fue reportado al filo de la 1:15 de la mañana (hora local) y se cree que el fuego se originó en el segundo piso, aunque hasta el momento se desconocen las causas que pudieron provocarlo.
Más de 40 camiones y 200 elementos del Cuerpo de Bomberos han trabajado en la zona. El alcalde de Londres, Sadiq Khan ha calificado el incendio como uno de los peores incidentes de los últimos tiempos, y no es para menos, pues se calcula que más de 500 personas perdieron su vivienda.
La Policía Metropolitana de Londres declaró en su cuenta de Twitter que “numerosas personas” fueron atendidas por heridas de diversa gravedad e inhalación de humo. Oficialmente, 74 personas han sido ingresadas a diversos hospitales del centro de Londres, 20 de ellas se reportan en estado de gravedad.
En el 2013, un grupo de vecinos advirtió a las autoridades sobre los inminentes riesgos que afrontaba el edificio. Puntualmente, refiriendose a los sistemas eléctricos los cuales podían causar un incendio. Sin embargo, sus peticiones fueron ignoradas.
La cortina de humo que dejó el incendio puede ser vista desde varios kilómetros a la redonda en el centro de Londres
