¿Crudo y en casa? Agradece que la tremenda beberecua de ayer terminó bien, porque seguramente hubo otros beodos en alguna parte del planeta que no tuvieron la misma suerte y acabaron siendo víctimas de las bromitas de sus “amigos”.
Aceptémoslo, no importa cuantas ganas tengamos de fiestear, hay ocasiones en que nuestro cuerpo no da el ancho, por lo que al final de la noche acabamos dormidos o irremediablemente inconscientes. Es por esto, que nuestros “amigos” castigan nuestra incapacidad para controlar el trago organizando bromas que arrancan más que una carcajada.
Lo interesante no es que los bromistas hagan bromas con sus amigos dormidos, sino el nivel de creatividad que algunos pueden llegar a lograr. Algunas bromas incluso podrían pasar por obras de arte conceptual que merecen un lugar especial en alguna respetada galería.
Así que ante el resultado de lo que un poco de creatividad y el lienzo en blanco que el cuerpo de un amigo inconsciente puede significar, les recomendamos controlar su trago y no ponerse al tú por tú con personas conocidas por su entereza, incluso después de haber bebido como cosacos.
Este pobre hombre tiene tal concentración que hasta inconsciente puede mantener el equilibrio de semejante torre de latas de cerveza.
Alineación y momento perfectos.
