Mientras que se ha anunciado que las autoridades federales han suspendido la búsqueda de los normalistas desaparecidos en Iguala el pasado 26 de septiembre, la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) informó el hallazgo de 17 fosas más en el municipio guerrerense.
Aun sin terminar de revisarlas en su totalidad, en dichas fosas –señaló Miguel Jiménez Blanco, encargado de rastreos- se han podido detectar dos cuerpos. El hallazgo fue realizado el pasado jueves 18 en la zona conocida como Barranca del Tigre, ubicada en Iguala, Guerrero. (La imagen es sólo ilustrativa).
En la extracción de los restos de las dos personas –que aún no han sido identificadas- participaron forenses de la Procuraduría General de la República. Se dio a conocer que el material será enviado a la Ciudad de México para su análisis. Según Jiménez Blanco, el lugar del hallazgo podría haber servido como campamento para grupos del crimen organizado, ya que hasta un árbol fue adaptado como punto de vigilancia.
Pero mientras lo anterior es reportado en Proceso, el diario La Jornada da cuenta de declaraciones de Abel Barrera Hernández –coordinador del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlalchinollan- quien señala que el gobierno federal suspendió las labores de búsqueda, por lo se está a la espera del grupo de expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ya que ellos revisarán el avance de las averiguaciones y también checarán los protocolos utilizados en las investigaciones.
“Ha sido muy limitada su participación [la del gobierno] (…) prácticamente es mero formalismo de cubrir el compromiso ante un planteamiento muy concreto (…) [las autoridades no cuentan con] una estrategia mucho más integral de cómo llevarla a cabo. Por eso los papás de los 42 jóvenes están realizando su propio trabajo”.
Además de denunciar el alto a la búsqueda realizada por las autoridades, Barrera Hernández remarcó que quienes sí continúan trabajando en el caso son los peritos, forenses y antropólogos argentinos, aunque lo hacen con reservas, en espera de los resultados que obtenga la gente de Austria, país al que fueron enviados los restos ubicados en Cocula y que -se presume- pertenecen a los jóvenes de Ayotzinapa. No hay que olvidar que hace unos días se confirmó que la identidad de uno de los normalistas correspondía con material encontrado en aquel sitio.