30 marcas mundiales y asociaciones en defensa de los trabajadores se unieron para pedirle al Gobierno de Camboya que investigue el uso de la fuerza letal en contra de trabajadores de la confección.

La carta, pide al gobierno poner en marcha un nuevo proceso para fijar los salarios mínimos y respetar los derechos de los trabajadores y los sindicatos. El grupo expresó su preocupación por la muerte y heridas a los trabajadores por parte de la policía, cuando las manifestaciones pacíficas estaban teniendo lugar sobre un aumento en el salario mínimo.

“La OIT ha señalado en el Convenio 87 ratificado por Camboya que nadie debe ser privado de libertad, ni ser objeto de sanciones penales por el mero hecho de organizar o haber participado en una huelga pacífica. Ahora el gobierno debe asumir la responsabilidad de proteger los derechos de los trabajadores y de los sindicatos. Representantes de los empleadores y los sindicatos deben participar en un diálogo constructivo que resulta en un salario digno real “.

Estas protestas fueron la actuación legítima de los trabajadores camboyanos que deben ser protegidas y ejerzan el derecho a hacer campaña por un salario digno.

Los grupos de derechos laborales y sindicatos de todo el mundo están expresando su indignación por la violencia brutal y la represión en Camboya después de las manifestaciones de los trabajadores de la confección y del calzado que piden un aumento en el salario mínimo.

  • Cese inmediato de toda violencia e intimidación contra los trabajadores y trabajadoras y sus representantes;
  • La liberación de todos los que han sido detenidos por su participación en las luchas
  • El respeto a la libertad de asociación y el derecho de los trabajadores a la huelga;
  • No tomar represalias contra las trabajadoras y dirigentes sindicales que han participado en la huelga
  • La reanudación de las negociaciones de la subida del salario mínimo
  • Asegurar que todos los responsables de la violencia contra los y las huelguistas paguen por su responsabilidad en estos hechos

La violencia contra las trabajadoras de la confección comenzó después de que varios sindicatos camboyanos convocaran a una huelga nacional el 24 de diciembre de 2013. Los trabajadores y trabajadoras exigían un aumento en el salario mínimo a 160 dolares americanos al mes. A medida que continuaban las protestas, la policía y los militares respondieron con violencia el 2 y el 3 de enero, matando al menos a 4 personas e hiriendo a casi 40.

La industria textil de Camboya emplea a más de 500,000 personas, es responsable de cerca del 95% de la exportación de Camboya y genera casi 60 mil millones de pesos al año. Actualmente el salario mínimo en Camboya es de $1,020 al mes, los sindicatos piden un aumento a $2,720.

Acá pueden ver la carta.

Vía: Ropalimpia.org

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