El sábado, la fuerza aérea de los Estados Unidos bombardeó un hospital administrado por Médicos sin Fronteras (MSF), esto en la ciudad de Kunduz, Afganistán. El ataque calificado por la organización como un “crimen de guerra”, dejó un saldo de 22 muertos.
Aunque las fuerzas estadounidenses cuentan con los más rigurosos procedimientos para evitar hechos como el cometido contra el mencionado hospital, el comandante de las fuerzas americanas en Afganistán, John Campbell, admitió que el bombardeó “fue atacado por error. Jamás atacaríamos intencionalmente instalaciones médicas”.
Según MSF, en varias ocasiones se envió las coordenadas en que se ubicaba su hospital a las fuerzas en conflicto –talibanas y las de coalición, lideradas por EEUU-, esto con el objetivo de evitar lo que terminó por ocurrir. Sin embargo, “de las 2:08 AM hasta las 03:15 AM, hora local de hoy, el Centro de Trauma de MSF en Kunduz fue golpeado por una serie de bombardeos aéreos, en incursiones a intervalos de aproximadamente 15 minutos”, denunció MSF en un comunicado emitido poco después del ataque.
Así es: pese a que las fuerzas norteamericanas sabían de la ubicación del nosocomio y que instantes después de ocurridas las primeras arremetidas personal de MSF informó de lo sucedido a jefes militares en Kabul y Washington… el ataque se prolongó por cerca de una hora.
“Se trató de una decisión tomada dentro de la cadena de mando estadunidense (…) el hospital fue golpeado por error durante un bombardeo solicitado por los afganos, pero resuelto por Estados Unidos”, justificó Campbell. A las pocas horas del ataque, el portavoz del Ministerio del Interior de Afganistán, Sediq Sediqqi, aseguró que con el bombardeo se consiguió dar muerte a entre 10 y 15 terroristas que se encontraban escondidos en el hospital.
Por lo sucedido hay tres investigaciones en curso: una por parte de los Estados Unidos, otra en Afganistán y una más por parte de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Con ellas se tratará de resolver en qué condiciones se resolvió el bombardeo.