Lo que necesitas saber:
Según la ICAN, mientras que la bomba de Hiroshima tuvo una potencia de 16 kilotones, la de la nueva (la B61-13) sería de 360.
La humanidad está en medio de dos guerras (la de Ucrania y la de Israel), pero, valiendo gorro, Estados Unidos sintió que era el mejor momento para dar a conocer que planea trabajar en el desarrollo de una nueva bomba nuclear… una que, según la ICAN, tendrá un poder destructivo 22 mayor a la utilizada en Hiroshima. Ahí nomas.
“Se trata de una escalada irresponsable de la carrera armamentista”, reprochó en un mensaje en redes la Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares (ICAN), en respuesta al anuncio que la semana pasada hizo el Pentágono: la creación de una nueva generación de bombas atómicas, destacando una en especial, la B61-13.
ICAN advierte que, por su poder destructivo, con esa bomba no se podría evitar matar a civiles
De acuerdo con un comunicado del Departamento de Defensa de Estados Unidos, la decisión de trabajar en la elaboración de una nueva bomba nuclear es simplemente en respuesta “a las demandas de un entorno de seguridad”… y qué da más seguridad que tener una bomba de alto potencial destructivo.
Aunque el Pentágono presume que, con la tecnología que ya se cuenta, la bomba B61-13 podrá “entregada” (más bien arrojada) con una precisión que garantizará atacar sólo objetivos militares, la ICAN asegura que no será así: el poder destructivo de la bomba es tal que sería imposible evitar matar indiscriminadamente a civiles.
Entonces, para los especialistas de la ICAN, lo único que se puede garantizar con el desarrollo de la mentada bomba es que, en caso de usarse, se estaría ejecutando un crimen de guerra.
¿Quiénes son los de la ICAN para andar cuestionando las decisiones del Pentágono?
Buena pregunta, sobre todo porque mientras los del Pentágono aseguran que no pasará nada, los de la ICAN prevén destrucción masiva. Pues bien, “algo” saben del tema los de la Campaña para Abolir las Armas Nucleares, tanto así que, incluso, en 2017 fueron reconocidos con el Nobel de la Paz “por su trabajo para llamar la atención sobre las catastróficas consecuencias humanitarias de cualquier uso de armas nucleares”.
De acuerdo con la directora ejecutiva de ICAN, Melissa Parker, la nueva bomba quire desarrollar el Pentágono (ya sólo espera el permiso del Congreso) tendrá una potencia de 360 kilotones… lo cual a muchos no dice nada, pero como data comparativo está el hecho de que la de Hiroshima tenía una potencia de 16 kilotones y que causó la muerte de 140,000 personas.