Se trata de un respiro aunque sea mínimo en plena pandemia de coronavirus —en los rollos económicos y de empleo. Los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) de agosto de 2020 mostraron un leve incremento de la población activa que está chambeando de manera formal e informal en nuestro país.
El aumento fue de 608 mil personas en la Población Económicamente Activa (PEA) —con una Tasa de Participación Económica de 55.1% respecto a la población de 15 años y más—, que representa un leve incremento de 0.1% en comparación con los registros de julio, al pasar de 52.6 a 53.2 millones.
Y ojo aquí, porque de las 12 millones de personas que salieron de este registro—la PEA— en abril, casi 7.8 millones se reincorporaron hasta agosto.
Pero eso no es todo. Por ahí la ENOE dio datos interesantes sobre la incorporación a los empleos o las actividades informales y la tasa de participación de hombres y mujeres.
El reporte del Inegi sobre empleos
“Las Tasas de Participación Económica de hombres y mujeres resultaron en 72.8 y 38.9 por ciento, respectivamente”, se lee en el comunicado publicado por el Inegi (Instituto Nacional de Estadística y Geografía), que por cierto se encargó de realizar esta encuesta.
Como podemos ver, la reincorporación no ha sido la misma para hombres y mujeres —al menos las mujeres registran una tasa menor en la participación económica, lo que podría traducirse en que enfrentan un poco más de problemas para reincorporarse en el trabajo en medio de la pandemia.
Con respecto a la población ocupada, 50.4 millones de personas se han sumado a las actividades económicas —y esto representa un aumento de 653 mil personas respecto a julio pasado.
“La población ocupada en jornadas de 35 a 48 horas semanales aumentó 1.9 millones entre julio y agosto de 2020. Por su parte los ocupados ausentes con vínculo laboral disminuyeron (-)1.1 millones de personas en el mismo periodo”.
¿Esto qué quiere decir? Que las personas con empleo y que mantienen jornadas de 35 a 48 horas a la semana aumentaron a 1.9 millones entre julio y agosto.
Y la banda ausente en el sector laboral disminuyó en el mismo periodo. Lo que significa un leve avance en la reincorporación laboral —después de la Jornada Nacional de Sana Distancia y los primeros meses de la pandemia de COVID-19 en México.
La tasa de subocupación —o sea, las personas que laboran en un empleo que requiere menor calificación de la que poseen— va por ahí. En agosto se registró una tasa de subocupación de 17%, cifra inferior a la registrada en julio.
Chamba informal
¿Qué hay de los trabajos formales e informales?
La ocupación informal en agosto aumentó a 27.8 millones —la tasa de informalidad laboral quedó en 55.1%, lo que representa una cifra mayor en 0.2 puntos comparada con julio.
Ya para finalizar esta especie de reporte como un respiro durante el trancazo del COVID-19 en materia económica, está el hecho de que la población desocupada disminuyó en agosto, en comparación de julio.
#ENOE_N la población ocupada en condiciones de informalidad, que antes de la emergencia sanitaria rondaba los 31 millones de personas y se contrajo a 20.7 millones con el confinamiento de abril 2020, se estimó en 27.8 millones de personas en agosto 2020 (55.1% de la ocupación). pic.twitter.com/74TpNip4ya
— Julio A. Santaella (@SantaellaJulio) September 28, 2020
En agosto fue de 5.2% y en julio de 5.4 como proporción de la Población Económicamente Activa.
Y la Población NO Económicamente Activa disponible pa chambear —es decir, que no trabajó ni buscó chamba pero que sí aceptaría una— fue de 10.7 millones.
En comparación con julio, esta población disminuyó en 549 mil personas en agosto.
Así van los avances leves en medio de una pandemia, que está lejos de terminar y para la que se necesita que la gente continúe con las medidas sanitarias para evitar más contagios y decesos —además de permitir que se retomen las actividades económicas en el país.
Si te interesa echarle un ojo al reporte de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Inegi, AQUÍ te dejamos el enlace.