Luego de conocer que la justicia española no lo suelta y reabrió las investigaciones en su contra por el delito de blanqueo de capitales, el muy indignado exgobernador de Coahuila, Humberto Moreira ya brincó.

De acuerdo con la defensa Moreira, las nuevas pesquisas “no se ajustan a derecho” y son una “grave violación” a las garantías, lamentó el susodicho por medio de un comunicado difundido por su defensa… pero bueno, no pasa nada: “Estamos ante un mecanismo habitual siempre que algún elemento nuevo llega a disposición de la Administración de Justicia española”, agregó.

Así como hace tiempo, cuando el exgober de Coahuila fue detenido y parecía que estaría guardado un buen tiempo en España, los abogados de Moreira indican que su cliente se encargará de demostrar la inconsistencia de las imputaciones contra su cliente, acusado del delito de blanqueo de capitales (lavado de dinero, pa’ la banda mexa).

Pero bueno, ¿por qué Moreira alega que se violan sus derechos con la reapertura del caso en su contra? Ahhh, pues porque esto supondría que la fiscalía española anduvo rascándole más al caso a espaldas de la autoridad judicial (“actuaciones secretas”, argumenta la defensa del expriista). Es decir, ha actuado fuera del procedimiento judicial  y con el fin de que los encargados de defender a tan fino personaje no puedan concretar sus actuaciones.

“La defensa del señor Moreira quiere poner de manifiesto que no tenía conocimiento de que esta toma de declaraciones por parte de la fiscalía española se hubiera producido, lo que representa una irregularidad procesal muy grave y una violación de las más elementales garantías para el afectado”.

De acuerdo con la defensa de Humberto Moreira, las diligencias que solicita la investigación de la fiscalía consisten en la ratificación de algunos testimonios que ciertos personajes habrían hecho en Texas, esto sin que los abogados del exmandatario tuvieran conocimiento… ah, porque hay que recordar que el coahuilense es investigado por los gringos por el delito de lavado de dinero.

La defensa de Moreira argumenta que los mencionados testimonios ( de sujetos identificados como Héctor Javier Villareal y Rolando González Treviño) fueron sacados no a base de tehucanazos, sino como consecuencia de acuerdos espurios con la fiscalía norteamericana.

En fin, la defensa de Moreira advierte que apelará la decisión de las autoridades españolas… no sin antes acreditar “hasta el último peso de sus cuentas y el origen lícito del mismo”. Ayayay.

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