El presidente de la Cámara de Diputados brasileña, Eduardo Cunha, ha autorizado un pedido de apertura de investigación contra la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff que podría removerla de su cargo por 180 días para permitir un juicio en el Senado.
Esto debido al hundimiento económico al que se está enfrentando Brasil el cual podría llevar al país a su peor recesión desde el periodo entre 1930 y 1931.
Esto es un capitulo más en el constante enfrentamiento entre los socialistas representados por Rousseff y los evangélicos conservadores representados por Cunha, quien también está luchando por mantener su puesto en la Cámara luego de un escándalo de corrupción en Petrobras.
Se creara una comisión investigadora que analizará el caso y, si se da el visto bueno, se someterá a votación en el Parlamento. Con 342 votos a favor, Rousseff sería destituida de la presidencia.