Pocas cosas tan tradicionales en China, como degustar la comida típica de aquella zona empleando unos palillos chinos. Sin embargo, esta tradición está provocando un serio problema de deforestación en los bosques de esa nación asiática.
Y es que el problema no es tanto que se coma usando palillos, sino que estos sean desechables. Según declaró Bo Guangxin, presidente de una asociación forestal independiente en China, al año se talan 20 millones de árboles con tal de preservar esta tradición. De acuerdo con los cálculos, de cada árbol se obtienen unos 4 mil palillos, lo que significaría unos 80 mil millones de palillos anuales.
Esta cifra rebasa los 57 mil millones reportados por la oficina forestal de China, órgano oficial del gobierno chino.
¡Con tanto palillo chino, podría cubrirse la plaza de Tiananmen unas 363 veces!
Si bien el tema no es nuevo en China, las nuevas cifras reportadas por varios activistas hacen que el problema sea cada vez más grave. Ya en el 2009, una encuesta documentó el ritmo vertiginoso de la deforestación, y como la cantidad y calidad de los bosques en China estaban por debajo de la media mundial. Un año antes, en el 2008, varias celebridades chinas hicieron una campaña de concientización para detener el uso de ese utensilio que además, varias pruebas señalan como tóxicos.
Incluso GreenPeace ha dedicado una campaña en contra del palillo chino desechable, culpando a su producción de la destrucción de 1.18 millones de metros cuadrados de bosque al año. Entre los problemas que se achacan a la deforestación, está que por la falta de arboles se presenten avalanchas y tormentas de arena, con las que varios poblados han sido arrasados, causando cientos de muertos.
Ante las críticas, China ha buscado reducir la fabricación de palillos chinos e incluso en el 2006 las autoridades aumentaron los impuestos a su producción. A pesar de las medidas, el problema sigue.
Ante la situación, Bo Guangxin expuso ante el parlamento chino la que parece ser la solución más sencilla, pero a la vez compleja, al problema: “Tenemos que cambiar nuestros hábitos de consumo y animar a la gente a llevar y sus propios utensilios para comer”.
Si bien el problema de China nos puede parecer lejano, cada vez son más los restaurantes de comida oriental que en otros países usan palitos de madera para degustar los alimentos (incluido México). El problema es crear conciencia en una acción tan cotidiana.
Y lo mismo ocurre con las bolsas de plástico, los vasos desechables en las cafeterías, las botellas desechables, y un angustioso etcétera.