Lamentablemente durante los últimos días hemos escuchado de varios casos de bullying en México; esta tendencia que no es única de nuestro país sigue incrementándose, y mientras las autoridades correspondientes encuentran una solución, una estudiante californiana encontró la manera de ponerle un “hasta aquí” a los maloras de su clase.
¿Eras de los típicos gandallas que se sienten mucho maltratando y humillando a sus compañeros? Pues checa esto, quizá te la aplicaron igual y ni cuenta te diste.
Esta joven, cuyo nombre aún se mantiene en anonimato, estudia en la escuela preparatoria Centennial, de Bakersfield, donde sufría bulying. Cansada de los malos tratos, decidió vengarse de sus agresores de una forma que nadie imaginó: regalándoles cupcakes con sorpresa incluida.
Ninguno de los malandros sospechó que aquellos pastelitos con relleno cremosito estaban preparados con ingredientes como semen, vello púbico y alimentos echados a perder.
¡¡¡Mmmmmmm, qué rico panquecito!!!, decían los chicos malos cuando daban las primeras mordidas, antes de notar que su comida tenía un sabor raro. Intrigados por el sabor a calcetín, le preguntaron a su compañera-víctima-chef por qué los pastelitos sabían medio rancios, entonces ella les reveló los ingredientes sorpresa… y pues se armó la gorda.
Los alumnos asqueados fueron de chillones con las autoridades escolares, y estas a su vez llamaron a la policía.
Tras una extensa sesión de preguntas y respuestas, la chica confesó que todo había sido una broma pesada para cobrarse todas las que le habían hecho y que en realidad no había usado ninguno de los ingredientes que le había dicho a sus compañeros, sino que únicamente hizo “desabridos” los cupcakes para que se fueran con la finta.
Ella no fue arrestada y los panques fueron tirados a la basura. Aunque si yo hubiera sido uno de los comensales, aún me quedaría la duda de si realmente esos cupcakes estaban libres de fluidos corporales. Ni hablar, por manchados ahora que vivan en la incertidumbre.
Hace dos días les contamos sobre un empleado de KFC que fue despedido después de ponerle vello púbico a la orden de unos clientes que se burlaron de una de sus compañeras, y ahora esto, nos prueba que la venganza es un plato que se come frío, y con vello púbico.