Un satélite ruso capturó la que se cree es la foto de más alta resolución de la Tierra jamás tomada desde el espacio.
La foto fue tomada por la cámara de Elektro-L, un satélite geoestacionario de observación climática a una distancia de 36.000 kilómetros del ecuador del planeta. Esta foto se diferencia de la célebre “maravilla azul” tomada por la NASA el 4 de enero pasado -que era una composición de varias imágenes- sobre todo por el color.
La imagen del 121 megapíxeles fue lograda con la combinación de longitudes de onda visibles e infrarrojas de luz.
Eso explica que la vegetación no se vea verde sino marrón anaranjado. Además ofrece detalles no sólo de movimientos de nubes, sino de variaciones de la vegetación. El Elektro-L fue lanzado desde el Cosmódromo de Baikonur en enero del año pasado.
Toma fotos de la Tierra cada 30 minutos y está programado para estar en órbita durante 10 años.