Han pasado dos años, pero la comunidad de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), los ciudadanos y las ciudadanas recuerdan la consignaNi una menos”: ni una mujer desaparecida, secuestrada, violentada, asesinada. El caso de Lesvy Berlín Rivera Osorio puso en acento en la necesidad de activar los protocolos de seguridad para mujeres, niñas y adolescentes tanto en los centros educativos como en las calles. Reforzó las peticiones de la sociedad civil para combatir la violencia de género y, finalmente, con el paso del tiempo ha significado una lucha por el acceso a la justicia por parte de las víctimas de un feminicidio.

A sus 22 años, Lesvy Berlín perdió la vida a manos de su novio —las autoridades capitalinas llevan a cabo la investigación por feminicidio en contra de Jorge Luis “N”, quien era la pareja de Lesvy. Sin embargo, su caso atravesó un proceso complejo en que las autoridades —en ese momento Miguel Ángel Mancera estaba al frente del Gobierno CDMX— abordaron de manera errónea las investigaciones, al publicar un par de tuits en los que afirmaban que la joven consumía drogas y alcohol, además de dar detalles de su vida cotidiana.

“No fue tu culpa”

Como mencionamos, el caso de Lesvy —quien fue encontrada sin vida el tres de mayo de 2017 en CU— ha significado la lucha por el acceso a la justicia por parte de sus familiares. Razones hay muchas: las autoridades señalaron que se había tratado de un suicidio, la agresión se registró en las instalaciones de Ciudad Universitaria (CU) y la alerta por los feminicidios en nuestro país había cimbrado a distintos estados.

Foto: Cuartoscuro.

Con respecto a la hipótesis del suicidio, la mamá de Lesvy rechazó esta versión y la Procuraduría General de Justicia CDMX tuvo que redirigir la investigación —aunque el novio de la joven declaró que Lesvy Berlín se había suicidado en una caseta telefónica y, sin embargo, las pruebas demostraban lo contrario. Por ejemplo, el video de una cámara de vigilancia  de la universidad que captó el momento en que la pareja discutía.

Aunado a esto, los juicios que se desencadenaron en redes sociales tras los tuits de la PGJ CDMX, que de manera indirecta culpaban a la estudiante por su muerte, fueron contrarrestados por hastags como #NoFueTuCulpa, #NiUnaMenos y #TodosSomosLesvy con el objetivo de concientizar a la sociedad sobre los crímenes de género, el costo de la violencia y sus alcances, así como la dignificación de la estudiante.

Finalmente, tras dos años de exigencias, este día los padres de Lesvy Berlín reciben las disculpas oficiales de las autoridades capitalinas. Y si bien estas disculpas no le regresan la vida a su hija, como ha declarado Araceli Osorio, sí ponderan la necesidad de reconocer estos crímenes para evitar su repetición, para dignificar el nombre de la joven y erradicar los feminicidios.

En esta lucha —la de los padres de la víctima— el camino es largo, ya que en CDMX está pendiente la declaratoria de la Alerta de Violencia de Género Contra las Mujeres (AVGM), la resolución de este caso y que el Estado, así como las autoridades universitarias —en este caso la UNAM— garanticen la seguridad para niñas, adolescentes y mujeres adultas.

**Foto de portada: Cuartoscuro.

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Hola, soy Lucy Sanabria. Desde 2018 redacto y reporteo para Sopitas.com, con especial entusiasmo en temas de derechos humanos y LGBT+. En 2021 fui parte de la generación de la beca de Periodismo Incluyente...

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